El Arzobispo de Toledo, Mons. Antonio Cañizares Llovera, durante la homilía en la Catedral Primada al celebrarse la solemnidad de la Epifanía del Señor, se refirió a las víctimas de la catástrofe ocasionada por el maremoto en el sudeste asiático, para afirmar que “es la hora de la verdad de nuestra caridad, que es más exigente aún que la misma solidaridad”.
Agregó que “es la hora de hacernos enteramente cercanos con quienes tanto y tanto están sufriendo, es la hora de compartir como hermanos y de ayudarles humanamente; es momento que nuestra caridad de obras corrobore la caridad de nuestras palabras”.
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El arzobispo también hizo referencia al Plan Ibarretxe e indicó que plantea «unas cuestiones preocupantes y de suma gravedad que afectan al corazón mismo de la realidad social de España y su unidad».
«Aparte de las razones históricas, jurídicas, económicas, políticas, de ordenamiento del Estado, desde el punto de vista moral, el plan soberanista aprobado en la Cámara Vasca el pasado día 30 de diciembre plantea unas cuestiones preocupantes y de suma gravedad», afirmó el Prelado.
Estas cuestiones, según Monseñor Cañizares, “afectan al corazón mismo de la realidad social de España, del bien común de nuestra sociedad, del actual marco de convivencia que afecta a todos los españoles y de la misma unidad de nuestra Nación; que también es una cuestión moral”, concluyó.