Con ocasión del rezo del Ángelus este domingo a mediodía en la plaza San Pedro, el Papa Juan Pablo II dijo que en el sacramento eucarístico encuentra su culmen la oración por los difuntos.
Tras recordar que “la piedad popular dedica el mes de noviembre al recuerdo de los fieles Difuntos”, el Santo Padre indicó que “rezamos por ellos con confianza, sabiendo que -como afirma Jesús en el Evangelio de hoy- Dios ‘no es de muertos, sino de vivos, porque para él todos viven’”.
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“Él permanece fiel a la alianza establecida con el hombre, alianza que ni siquiera la muerte puede romper”, dijo el Papa antes de rezar la oración mariana junto a varios miles de peregrinos presentes en la plaza vaticana.
“Este pacto, sellado en la Pascua de Cristo, se hace constantemente actual en el sacramento de la Eucaristía. En ella, por tanto, encuentra su culmen también la oración por los difuntos”, explicó el Pontífice.
“Al ofrecer por ellos la santa Misa, los creyentes apoyan su purificación última. Al acercarse con fe a la santa comunión, refuerzan los vínculos de amor espiritual con ellos”, refirió.
Al concluir su intervención, el Papa pidió a la Virgen María que interceda “por todos nuestros queridos difuntos, y refuerce en nosotros, peregrinos en la tierra, la fe en la resurrección final, de la que el sacramento de la Eucaristía es prenda”.