El santuario mariano de Betania, conocido como El Lourdes de América, se ha convertido en un lugar privilegiado para ganar indulgencias en Venezuela durante la celebración del Jubileo 2025 convocado por el Papa Francisco.

El P. Antonio Rivas, rector del santuario, aseguró a ACI Prensa que Betania, con la intercesión de la Madre de Dios, puede ayudar a sanar “a un país que está fragmentado en muchos aspectos”. La Iglesia Católica en Venezuela ha reconocido que en este lugar la Virgen se apareció a la Sierva de Dios María Esperanza de Bianchini, entre 1976 y 1984.

Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram

Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:

La primera aparición ocurrió el 25 de marzo de 1976. La Virgen se identificó a la vidente como “María, Virgen y Madre Reconciliadora de todos los Pueblos y Naciones”.

El P. Rivas recordó que estas apariciones en Betania fueron aprobadas en 1988 por el entonces Obispo de Los Teques, Mons. Pío Bello Ricardo, quien en una Carta Pastoral —luego de una extensa investigación— declaró que las apariciones son auténticas, tienen carácter sobrenatural y son de origen divino.

Cabe indicar que en mayo de 2024 el Dicasterio para la Doctrina de la Fe publicó nuevas normas para el discernimiento de presuntos fenómenos sobrenaturales, que determinan que la declaración de sobrenaturalidad de las presuntas apariciones será excepcional y quedará reservada al Papa.

“No me refiero solamente a lo político, ni a lo social, sino también a lo familiar. El Año Jubilar y el mensaje reconciliador de María en Betania nos invitan a tener esperanza en el perdón, a estar cerca de Dios, cerca de nuestros hermanos”, dijo el P. Rivas.

“La espiritualidad del santuario está anclada en eso: en la reconciliación, no solo con nosotros mismos y con Dios, sino con aquel que está cerca de mí y piensa distinto”, agregó.

“Todos lo necesitamos: Un mensaje reconciliador. Ya basta de rencillas y de diferencias, hay que buscar los puntos en común. El santuario es un lugar para todos, está abierto. Aquí se puede vivir esa fraternidad universal”, añadió.

El Jubileo 2025 fue inaugurado oficialmente en Betania el 2 de febrero, con una Misa a la que asistieron cientos de peregrinos. 

Todos los fines de semana, el santuario acoge a personas de todo el país decididas a ganar una indulgencia plenaria. Allí son recibidos por una gran puerta, construida especialmente para el Año Santo del 2000 y que por su forma resalta “el valor de la Eucaristía” para Venezuela, como única nación del mundo consagrada al Santísimo Sacramento.

De hecho, el 8 de diciembre de 1991, al celebrarse una Misa en el lugar, una hostia después de la consagración comenzó a “mancharse” de un líquido rojo. Diversos estudios científicos corroboraron que se trataba de sangre humana y, en 1992, Mons. Bello declaró como “hecho milagroso” el sangramiento de aquella hostia en el Santuario de Betania.

“El mensaje y la espiritualidad de Betania están totalmente en sintonía con este Año Jubilar”, afirmó el rector, quien resaltó la gran afluencia de almas que han llegado al santuario para confesarse desde que se inauguró el Jubileo. El P. Rivas explicó que la esperanza y la reconciliación son dos puntos que van de la mano.

“El sacramento de la reconciliación está firmemente anclado en el Año Jubilar, cuya misión es hacernos sentir la misericordia y el amor de Dios, a través de signos concretos. El santuario es una tierra de gracia donde se vive la esperanza y la reconciliación”, concluyó.

Para organizar una peregrinación al Santuario de Betania, puede ponerse en contacto a través de sus redes sociales.