Los presos, protagonistas en el Jubileo de los Artistas

Más de 10.000 personas vinculadas al mundo del arte y de la cultura, provenientes de más de 100 países, participarán en el Jubileo de los Artistas y del Mundo de la Cultura, el tercer gran evento de los 36 previstos en el marco del Jubileo  de la Esperanza.

El prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación, el cardenal José Tolentino de Mendonça, resumió los principales actos previstos para este acontecimiento que, según indicó, “busca resaltar el papel del arte y la cultura como motores de transformación y diálogo”.

El sábado 15 de febrero arrancará el evento con una audiencia con el Papa Francisco en el Aula Pablo VI. A continuación, tendrá lugar el encuentro internacional entre dirigentes de museos, directores de instituciones culturales y profesores universitarios en torno al tema Sharing hope – Horizons for Cultural Heritage (Compartir la esperanza - Horizontes para un Legado Cultural). 

En la cita que tendrá lugar en la sala de conferencias de los Museos Vaticanos, el sábado 15 de febrero, a las 10:00 horas (hora local), los participantes firmarán “un manifiesto educativo sobre la transmisión del código cultural de las religiones”, informó el cardenal Mendoza.

En declaraciones a ACI Prensa, el historiador de la Universidad de La Sapienza, Alessandro Zuccari, uno de los relatores que tomará la palabra, aseguró que el encuentro será un impulso para promocionar los valores cristianos como la fraternidad y la paz “en un mundo en el que predomina el individualismo y la beligerancia”.

“En el origen de la civilización occidental se encuentra el cristianismo con su mensaje de esperanza, de inclusión, de concordia y de universalidad”, indicó.

Presos, protagonistas del Jubileo de los Artistas

Ese mismo día está prevista la inauguración del espacio expositivo Conciliazione 5 con una exposición del artista chino Yan Pei-Ming, que ha retratado a los presos de la cárcel de Roma Regina Coeli. 

Este gesto que se enmarca también en el deseo del Papa Francisco de extender al mundo de las prisiones la esperanza que se deriva del Año Jubilar. De hecho, tras inaugurar el Jubileo de la Esperanza con la apertura de la Puerta Santa de la basílica de San Pedro, el Pontífice se desplazó dos días después, el 26 de diciembre, hasta la cárcel de Rebibbia para repetir el gesto.

Las puertas santas, como es tradición, están únicamente en las cuatro basílicas papales de Roma —San Pedro del Vaticano, San Juan de Letrán, Santa María la Mayor y San Pablo Extramuros— pero además el Pontífice hizo protagonistas de este gesto de gracia a los presos, con la apertura de la puerta de este centro penitenciario de la capital italiana.

En la bula con la que convocó el Jubileo, Spes non confundit, el Pontífice animó al mundo a ser “símbolo tangible de esperanza” y pidió a los responsables políticos que durante el Año Santo promovieran “iniciativas de amnistía o de condonación”.

En este sentido, el pasado 11 de septiembre el arzobispo Rino Fisichella, proprefecto del Dicasterio para la Evangelización, sección para las Cuestiones Fundamentales de la Evangelización en el Mundo, firmó un acuerdo con el ministro de Justicia italiano, Carlo Nordio, y el comisario del gobierno, el alcalde Roberto Gualtieri, para hacer efectivas durante el Jubileo nuevas formas de reinserción en actividades de compromiso social para los presos. 

Como parte del programa del Jubileo de la Esperanza, las obras del artista chino, el primero de su país en exponer en el Louvre, se proyectarán en la fachada de la prisión como símbolo de visibilidad y dignidad. 

 "Mirar la comunidad penitenciaria de una manera diferente es necesario”, aseguró por su parte la comisaria de la exposición, Cristina Parrella, durante la presentación.

Formado académicamente en China pero establecido en Francia desde que tenía 20 años, Yan Pei Ming se define como un artista con raíces pero sobre todo con alas. Nacido en Shanghai, en 1960, ha conseguido el reconocimiento internacional con sus retratos realizados con una sobria paleta de colores, tan solo blanco, negro y rojo, que impactaron por su sugerente equilibrio entre figuración y abstracción.

Ha pintado figuras icónicas como Mao Zedong, Bruce Lee, Barack Obama, pero también al Papa Francisco. 

Visita histórica del Papa Francisco a Cinecittà

Uno de los momentos más esperados del Jubileo de los Artistas será la visita del Papa Francisco, la primera de un Pontífice, a los estudios de Cinecittà, en Roma (Italia), uno de los símbolos de la industria cinematográfica mundial, donde se han rodado más de 3.000 películas. 

En este espacio, donde se grabaron 47 películas que acabaron ganando un Premio Oscar, se reunirá con artistas, trabajadores del mundo del cine, en un encuentro acompañado por el coro italiano “La Nave”, en el que participan detenidos y voluntarios.

Se trata de una iniciativa de la prisión de San Vittore en Milán, Italia, que forma parte de un proyecto de rehabilitación e inclusión social de los presos a través de la música. Además de su valor artístico, el canto coral en este contexto contribuye al tratamiento y reintegración de los participantes.  

“Esta actuación especial incluirá a más de cincuenta miembros, entre detenidos, ex detenidos y voluntarios, y simboliza una experiencia de inclusión social a través de la música”, señaló el Cardenal Mendoza.

Misa con los 10.000 inscritos del Jubileo de la Esperanza

Un día antes, el domingo 16 de febrero, el Papa Francisco presidirá una Misa en la Basílica de San Pedro en la que está previsto que participen los 10.000 inscritos en la página web oficial del Jubileo. 

También está prevista la inauguración de una instalación sonora del artista estadounidense Bill Fontana en el campanario de la basílica de San Pedro. Este artista y compositor especializado en arte sonoro, nació en 1947 en Cleveland.

Desde la década de 1970, ha explorado el sonido como medio artístico, creando instalaciones que transforman la percepción del espacio y el entorno a través de paisajes sonoros en tiempo real.

Fontana ha trabajado con instituciones como el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA), el Centro Pompidou y la Tate Modern, y ha colaborado con lugares emblemáticos como el Puente Golden Gate y la Ópera de Sídney. Su obra a menudo capta y reinterpreta sonidos de la naturaleza, la arquitectura y la tecnología, creando experiencias inmersivas que revelan la musicalidad del mundo cotidiano.