El Papa Francisco envió por sorpresa un vídeo mensaje el martes 11 de febrero al Festival de San Remo, el evento musical más famoso de Italia, que con los años se ha convertido en una de las realidades televisivas más seguidas en el país transalpino.
A través del vídeo grabado en italiano desde su apartamento de Casa Santa Marta, el Pontífice conectó con el programa de la televisión pública Rai, para ensalzar la importancia de la música.
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“La música es belleza, la música es un instrumento de paz. Es una lengua que todos los pueblos, de diferentes maneras, hablan y llega al corazón de todos. La música puede ayudar a las personas a vivir juntas”, expuso.
En el mensaje televisado, el Papa Francisco también recordó de forma entrañable a su madre y describió cómo, cuando era niño, le narraba con cariño “algunos pasajes de óperas”. Un episodio vital que le hizo entender al Pontífice “el sentido de la armonía y los mensajes que puede dar la música”.
El Santo Padre se refirió también a la celebración de la Jornada Mundial del Niño, cuya segunda edición tendrá lugar en mayo en el Estadio Olímpico de Roma y lo describió como “un momento hermoso” en el que se encontrarán pequeños de todo el mundo.
Así, denunció que las guerras “destruyen a los niños” al tiempo que enfatizó que los conflictos armados son “una derrota” para todos.
El Papa Francisco también aprovechó la ocasión para lanzar un mensaje de fraternidad a la sociedad y pidió que “quienes se han odiado se den la mano” y “se abracen”.
En todo caso, llamó a “decir con la vida, con la música y con el canto: ¡la paz es posible!”. “Hoy lo estáis haciendo y lo estáis dando a conocer a través de la música”, agradeció a los organizadores del famoso Festival de San Remo.
En definitiva, el Santo Padre puso en valor la música como un arte que es capaz de “abrir el corazón a la armonía, a la alegría de estar juntos, con un lenguaje y un entendimiento común”.
Finalmente destacó que la música supone un impulso para crear “un mundo más justo y fraterno”.