El Cardenal Luis Antonio Tagle, Pro-Prefecto del Dicasterio para la Evangelización en el Vaticano, afirmó que “el antídoto” para la hostilidad contra la religión en un mundo cada vez más secularizado es el diálogo entre los creyentes.
Según informa la agencia vaticana Fides, esta fue una de las principales afirmaciones del purpurado filipino en su intervención en la entrega del Premio Zayed a la fraternidad humana en Abu Dabi, capital de Emiratos Árabes Unidos, importante país musulmán de Medio Oriente.
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Tras denunciar la tendencia de sociedades secularizadas de vivir con “la desconfianza o incluso la hostilidad no solo hacia tradiciones religiosas específicas, sino hacia la dimensión religiosa en sí misma”, el cardenal destacó que la Iglesia Católica apoya el “valor de promover la amistad y el respeto entre hombres y mujeres de diferentes tradiciones religiosas”.
El Pro-prefecto resaltó que esto se hace más importante aún porque “por una parte, el mundo se ha hecho, en cierto sentido, ‘más pequeño’ que nunca y, por otra, el fenómeno de la migración ha intensificado el contacto entre personas y comunidades de diversas tradiciones, culturas y religiones”.
El Cardenal Tagle reiteró la importancia del diálogo interreligioso, especialmente ante una sociedad en la que “la religión se ve como algo inútil o incluso peligroso, y a menudo se piensa que la convivencia sólo es posible si las personas relegan su filiación religiosa a la esfera puramente privada o se reúnen en espacios ‘neutros’, desprovistos de toda referencia a lo trascendente”
Luego de recordar que no es bueno renunciar a las propias convicciones, el purpurado señaló que “el reconocimiento del derecho fundamental a la libertad religiosa, en todas sus dimensiones, es esencial para la paz mundial y la convivencia común”.
Este año el Premio Zayed se entregó a World Central Kitchen, organización humanitaria que brinda alimentos a comunidades afectadas por crisis y conflictos; a la Primera Ministra de Barbados, Mia Mottley, por su labor en la lucha contra el cambio climático; y al joven etíope-estadounidense Heman Bekele, de sólo 15 años, que ha desarrollado un jabón económico para prevenir y tratar el cáncer de piel en sus primeras fases.
Estos premios se entregan a seis años delDocumento sobre la Fraternidad Humana para la Paz Mundial y la Convivencia Común, firmado en Abu Dabi el 4 de febrero de 2019, por el Papa Francisco y el Gran Imán de Al-Azhar.