El Superior General de la Compañía de Jesús, el sacerdote venezolano Arturo Sosa, convocó a los superiores mayores jesuitas a una cumbre mundial que se realizará en octubre en Roma para tratar diversos temas como su vida y misión, el voto de pobreza, los abusos sexuales en sus comunidades y el papel de la mujer en su apostolado, entre otros.

Será la tercera ocasión en la que los superiores mayores jesuitas se reúnan, luego de los encuentros realizados en los años 2000 y 2005. Esta vez, la cumbre se celebrará del 17 al 26 de octubre, en el marco del Jubileo de la Esperanza 2025.

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En una carta con fecha 16 de enero, el P. Sosa señala que la reunión de octubre “representa un paso importante en el proceso de discernimiento de la vida-misión de la Compañía de Jesús inspirado por la 36ª Congregación General” que urgió a los jesuitas a “responder con valentía a los signos a través de los cuales el Espíritu Santo nos va conduciendo en el mejor modo de servir a la misión encomendada por el Señor Jesús a la Iglesia”.

El superior general destaca asimismo que “el examen del significado y desafío del voto de pobreza, junto a la revisión de los Estatutos de la Pobreza Religiosa de la Compañía de Jesús y la Instrucción sobre Administración y Finanzas, ha sido otra llamada de atención del Espíritu Santo” a los jesuitas.

El P. Sosa señala además que en estos años “ha sido duro tomar conciencia de la presencia de toda clase de abusos en todos los contextos sociales en los que vivimos y trabajamos. Ha sido difícil reconocer su presencia dentro de nuestras comunidades y obras apostólicas”.

En ese sentido, resalta que “se han dado pasos importantes: reconocer cada caso, tomar las medidas pertinentes, facilitar procesos de justicia y reconciliación. Al mismo tiempo se han desarrollado programas para prevenir posibles casos y fortalecer ‘ambientes seguros’ en las obras apostólicas”.

Tal vez uno de los casos más difíciles de abusos que han enfrentado los jesuitas en años recientes es el del artista y sacerdote esloveno Marko Rupnik, sobre quien pesan múltiples acusaciones de abuso espiritual, psicológico y sexual contra más de 40 religiosas a su cargo, y que fue expulsado de la Compañía de Jesús en junio de 2023.

Otros casos que han recibido amplia cobertura mediática son los del P. Alfonso Pedrajas “Padre Pica”, sacerdote español fallecido en 2009 y que abusó de al menos 80 menores en Bolivia; y el del presbítero chileno Felipe Berríos, expulsado de la Compañía de Jesús tras ser hallado culpable de abusos cometidos contra “siete mujeres, que tenían entre 14 y 23 años cuando ocurrieron”.

En abril de 2024 el P. Julio Fernández Techera, sacerdote jesuita y rector de la Universidad Católica de Uruguay (UCU), escribió un ensayo crítico sobre la Compañía de Jesús, advirtiendo que la orden está en “profunda decadencia”.

Similares críticas expresó en 2022 el fallecido Cardenal George Pell, quien sugirió realizar una visita apostólica o investigación a la Compañía de Jesús, porque “la Orden está altamente centralizada, susceptible de ser reformada o arruinada desde arriba”.

En su carta del 16 de enero, el P. Sosa escribió que “en la vida apostólica de la Compañía hay procesos en marcha” como “la reflexión sobre el papel de la mujer en el apostolado de la Compañía”, los hermanos jesuitas, la educación, el compromiso con la ecología integral, y los Ejercicios Espirituales de San Ignacio y las Constituciones.