Mons. Rey acepta pedido del Papa Francisco y renuncia como Obispo de Fréjus-Toulon

Mons. Dominique Rey ha aceptado la petición del Papa Francisco de renunciar como obispo de la diócesis francesa de Fréjus-Toulon. Aunque manifiesta su obediencia al Santo Padre, el prelado afirma desconocer las razones de su decisión. 

Esta diócesis del sur de Francia, sufragánea de la Arquidiócesis de Marsella, ha estado en el punto de mira desde que en junio de 2022 el Vaticano ordenó suspender las ordenaciones sacerdotales y diaconales tras una visita “fraternal” por parte del Cardenal Jean Marc Aveline.

La polémica se agravó tras la visita apostólica iniciada en febrero de 2023 y llevada a cabo por el Arzobispo de Dijon, Mons. Antoine Hérouard, y Mons. Joel Mercier, secretario emérito del Dicasterio para el Clero, quienes entrevistaron a más de un centenar de personas.

El resultado de esta visita fue el nombramiento de Mons. François Touvet como obispo coadjutor de la diócesis, a quien se le confió facultades propias de gobierno en diferentes ámbitos.

En un comunicado difundido este 7 de enero desde la Diócesis de Fréjus-Toulon, Mons. Rey relata que, tras el nombramiento del obispo coadjutor, el Papa Francisco le animó “a asumir esta colaboración en un espíritu fraternal y a no presentar mi dimisión”.

Precisa asimismo que fue el nuncio quien le informó de que el Santo Padre le pedía que presentara su renuncia como obispo diocesano, “sin que haya tenido conocimiento de nuevos elementos respecto a los que motivaron la designación del obispo coadjutor”.

“Frente a las incomprensiones, las presiones y las polémicas, siempre nefastas para la unidad de la Iglesia, el criterio último de discernimiento sigue siendo para mí el de la obediencia al Sucesor de Pedro”, señala a continuación.

Asegura también que está “profundamente agradecido de haber visto a tantos jóvenes ofrecer su vida al servicio de la Iglesia”.

Mons. Rey, quien fue designado por San Juan Pablo II en el año 2000, agradece a Dios al final del comunicado “por las bendiciones y los frutos misioneros”, así como “a todos los miembros del clero, a los consagrados y a los fieles laicos por su compromiso fiel y generoso”. 

El prelado afirma que seguirá “orando para que esta comunión misionera se despliegue en la fidelidad al Evangelio y al amor por la Iglesia” y anuncia que celebrará una Misa de acción de gracias el sábado 1 de febrero. 

El obispo francés, de 72 años, es conocido por su cercanía a los movimientos tradicionalistas y su defensa de la doctrina católica. 

Tras la promulgación de Traditionis custodes, el motu proprio de 2021 del Papa Francisco que restringe la Misa celebrada en la forma extraordinaria del Rito Romano, Mons. Rey destacó las preocupaciones de varios sacerdotes y comunidades de su diócesis.