Mientras el mundo se prepara para empezar de nuevo en 2025, las promesas de comer mejor, hacer ejercicio y leer más libros suelen ser el centro de atención.

Sin embargo, me gustaría animar a mis hermanos cristianos a examinar honestamente los comportamientos y acciones que no sólo nos dañan a nosotros mismos, sino también a los demás.

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Desde la disciplina digital hasta la oración, ¿qué debería estar en tu lista? A continuación, se enumeran 5 hábitos que todos deberíamos abandonar en 2025, con razones de peso para hacerlo:

1. Pasar demasiado tiempo con el teléfono

Un estudio reciente reveló que los adultos suelen pasar más de 4,5 horas al día con el teléfono. 

¿Por qué es destructivo? Porque nos quita tiempo para estar con la familia, disminuye la productividad (posiblemente robando salarios), afecta las relaciones y es un mal testimonio para nuestros hijos. 

Además, usar el teléfono mientras se conduce puede provocar accidentes, daños a la propiedad o la muerte. ¿Qué hacer? Existen muchas aplicaciones y estrategias para combatir el uso excesivo del teléfono. Úselas para rendir cuentas o comprométase a guardar el teléfono durante determinadas horas. Su vida será mejor sin él.

2. Llegar siempre tarde

Lo entiendo. Soy madre de cuatro hijos y he puesto muchas excusas para llegar tarde. 

¿Por qué es destructivo? Hay razones legítimas para llegar tarde de vez en cuando, pero la tardanza crónica puede ser un pecado contra la caridad, porque falta al respeto a los horarios de los demás, le cuesta tiempo a la empresa, es disruptiva (como durante la Misa) y, en algunos casos, hace que otras personas también lleguen tarde.

Ir siempre tarde puede incluso ser una ocasión de pecado por exceso de velocidad o conducción imprudente. ¿Qué hacer? Admita que le lleva más tiempo de lo esperado llegar de un lugar a otro y agregue tiempo de reserva a su agenda. En mi caso, sé que necesito al menos 15 minutos adicionales para salir por la puerta con cuatro niños. ¡Esfuércese por llegar temprano y no llegará agotado!

3. “Incumplir” con frecuencia

El hábito de cancelar planes en el último minuto. 

¿Por qué es destructivo? Cuando cancelamos planes repetidamente, demostramos una falta de consideración por los demás. La gente pierde la confianza en nuestra fiabilidad y es menos probable que se pongan en contacto con nosotros en el futuro. 

¿Qué hacer? No te comprometas a menos que estés seguro de que puedes cumplir y honrar tu palabra. Si reconoces que tienes tendencias inestables, haz un trabajo interior para llegar a la causa raíz: ¿Estoy demasiado ocupado o comprometido en exceso? ¿Acepté asistir por culpa? ¿Estoy cancelando porque apareció algo "mejor"? Enfrenta este hábito con honestidad y humildad, y decide cambiar.

4. No tener un presupuesto, un horario y un plan de comidas

El dinero ya es un punto delicado para las parejas, y hasta el 34% de los adultos en relaciones lo citan como un desencadenante de peleas. Los estudios han demostrado que los humanos, especialmente los niños, prosperan con rutinas. Y los planes de comidas son fruto de un buen presupuesto y una buena programación. Sin embargo, alguien que no tenga el hábito de hacer ninguna de las tres cosas podría no ver el problema inmediato.

¿Por qué es destructivo? Déjame ser claro: ¡no tener esta tríada de organización no es un pecado! Sin embargo, la falta de planificación perpetúa los malos hábitos y los malos resultados, como la tardanza, el incumplimiento de compromisos, los gastos impulsivos, el desperdicio de alimentos, etc. Puede provocar discusiones entre los cónyuges y privar a los hijos de estabilidad. 

¿Qué hacer? No hay necesidad de complicar demasiado las cosas. Los usuarios de Reddit tienen opiniones encontradas sobre si la IA es útil o no, pero nuestra familia utiliza un calendario de Google sincronizado para los horarios y actividades laborales y un buen método antiguo de lápiz y papel para administrar las tareas diarias como la escuela, los recados, las comidas y la Misa diaria, y también incluimos la intención de oración del día. Encuentra un sistema que funcione para ti y apégate a él.

5. Descuidar la oración y el tiempo debido a Dios

Dios nos creó para conocerlo, amarlo y servirlo en este mundo para que podamos ser felices con él para siempre en el cielo. Cuando nuestros días están atiborrados de trabajo, escuela, actividades extracurriculares y otras ocupaciones, ¿cuánto tiempo queda para Dios?

¿Por qué es destructivo? Un día debidamente ordenado tiene un equilibrio entre trabajo, descanso, recreación y oración. Cuando estamos “demasiado ocupados”, generalmente nuestra vida de oración se ve afectada. Como resultado, robamos deliberadamente a Dios el tiempo y la atención que se merece. También nos robamos a nosotros mismos y a nuestras familias las gracias que provienen de orar juntos y recibir los sacramentos con frecuencia. 

¿Qué hacer? ¡Que este sea el año en que vuelvas tu corazón y tu mente hacia Dios! No importa lo ocupado que estés, es posible reorientar tu vida hacia Dios.

Mi esposo y yo te mostramos cómo en The Prayer Book for Tired Parents: Practical Ways to Grow in Love of God and Get Your Family to Heaven [El libro de oraciones para padres cansados: Formas prácticas de crecer en el amor a Dios y llevar a su familia al cielo], publicado por EWTN. Descubre formas realistas de poner a Dios primero, desarrollar hábitos concretos de oración y cultivar la paz de Dios en tu hogar. ¡Es una resolución que vale la pena tomar en 2025!


Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en el National Catholic Register.