El P. Ignacio Belzunce, sacerdote del Opus Dei encargado de la pastoral del Colegio Orvalle de Madrid ha fallecido este jueves 2 de enero tras sufrir un accidente en bicicleta el pasado 25 de diciembre de 2024, día de Navidad.

Así lo han comunicado desde el centro educativo, pocas horas después de que indicaran a ACI Prensa que la situación seguía "siendo difícil" y que el presbítero necesitaba tiempo.

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"Tras ser atendido por los servicios de emergencia, fue trasladado con un traumatismo craneal severo acompañado de múltiples hemorragias cerebrales, a la UCI del Hospital de La Paz, donde ha permanecido ingresado hasta su fallecimiento", informa el Colegio Orvalle.

La familia ha publicado a través del colegio un comunicado en el que ha fallecido "rodeado por la oración y la serenidad que siempre acompañaron su vida de fe", habiendo recibido el sacramento de la Unción de enfermos y "dejando tras de sí un legado de amor y servicio a Dios y a su pueblo".

"Durante estos días de novena, desde el 25 de diciembre; día del accidente, hasta el día de hoy, hemos experimentado cómo la oración congregada en torno a él ha sido un testimonio de la comunidad de fe que él mismo cultivó con tanto amor y dedicación. Ignacio fue y sigue siendo una escalera hacia el cielo para muchos", añaden. 

En el texto se comparte que, antes de fallecer, "la última canción que escuchó en vida fue Tu scendi dalle stelle ('Tú bajas de las estrellas'), un villancico que, al narrar la humildad, el sacrificio y el amor divino de Jesús, resuena ahora de manera profunda y significativa en sus propios últimos momentos".

"En esa melodía, tan llena de devoción, podemos ver reflejada la vida de Ignacio: un hombre que se entregó para servir con humildad, amor y generosidad", añaden sus familiares.

En el comunicado, los más allegados al sacerdote han deseado "que su ejemplo nos inspire a seguir su camino de servicio y devoción. Que su alma repose en la gloria de Dios, y que su intercesión continúe guiándonos y protegiéndonos en nuestra vida espiritual". 

Tras gradecer "cada oración que ha intercedido por su ascensión directa al cielo", concluyen diciendo: "Así como él nos decía: ¡Eutsi! ¡Ánimo! La vida continúa, siempre en la luz de Dios".

"Escuchar, escuchar y escuchar a los alumnos"

Nacido en Pamplona en 1970, se licenció en ingeniería Industrial en la Universidad de Navarra. En 2001 fue ordenado sacerdote por Mons. Javier Echevarría, segundo sucesor de San Josemaría Escrivá, fundador del Opus Dei.

Su labor pastoral se ha caracterizado por la atención a los alumnos de los colegios El Prado, Montealto y Orvalle, a donde recaló el pasado año. Según traslada este último centro, "cada mañana se proponía ''escuchar, escuchar y escuchar a los alumnos. Así es como se aprende'''.

Del sacerdote destacan por último "su dedicación y cercanía, siempre disponible para los demás" y que era "un gran deportista, apasionado del esquí de travesía y la bicicleta".

Horas antes de su fallecimiento desde el Colegio Orvalle explicaban que se mantenía la preocupación sobre el estado del presbítero, a quien le habían podido "reducir la sedación" sin complicaciones, pese a lo cual la situación era calificada de "difícil".

“Don Ignacio es fuerte y cuenta con la oración de mucha gente”, señalaron.

El pasado lunes 30 de diciembre tuvo lugar en la capilla del colegio una vela al Santísimo a la que acudieron numerosas personas. El colegio también ha recibido mensajes de apoyo desde diversos países, según han publicado a través de su cuenta en Instagram.

ACTUALIZACIÓN: 2 de enero de 2025 a las 10:33 GMT+2