El secretario de Estado vaticano, Cardenal Pietro Parolin, ha enviado un telegrama en nombre del Papa Francisco con motivo del fallecimiento del expresidente de los Estados Unidos de América, Jimmy Carter.
“Su Santidad el Papa Francisco ha recibido con tristeza la noticia del fallecimiento del expresidente Jimmy Carter y ofrece su más sentido pésame”, comienza el mensaje de condolencias.
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“Recordando el firme compromiso del presidente Carter, motivado por una profunda fe cristiana, con la causa de la reconciliación y la paz entre los pueblos, la defensa de los derechos humanos y el bienestar de los pobres y necesitados, el Santo Padre lo encomienda a la infinita misericordia de Dios todopoderoso y reza por el consuelo de todos los que lloran su pérdida”, concluye.
Por su parte, el arzobispo Timothy P. Broglio, presidente de la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos, ha publicado una declaración en la que destacó que “su trabajo de toda la vida en favor de la paz entre las naciones seguirá sirviendo de inspiración para un mundo necesitado de pacificadores” y aseguró sus oraciones “por el descanso de su alma y el consuelo de su familia”.
James Earl Carter Jr. nació en 1924 en Georgia (EE.UU.) y falleció en el mismo lugar este domingo 29 de diciembre. Fue el trigésimo noveno presidente de los Estados Unidos (1977-1981) y galardonado en el año 2002 con el premio Nobel de la Paz.
Perteneció a la Iglesia Bautista, de la que se distanció a partir del año 2000 después de que la Convención Bautista del Sur se opusiera a que las mujeres pudieran ser pastoras.
En materia de aborto, Carter aseguró: “Nunca he creído que Jesucristo aprobaría los abortos”. Sín embargo, manifestó su apoyo a esta práctica en caso de violación o incesto o riesgo para la vida de la madre.
Según recoge OnTheIssues.org, durante el tercer debate presidencial contra Gerald Ford en la campaña de 1976, Carter afirmó:
“Creo que el aborto está mal. No creo que el Gobierno deba hacer nada para fomentar el aborto, pero no estoy a favor de una enmienda constitucional sobre el tema. Pero a falta de una enmienda constitucional, y dentro de los límites de una sentencia del Tribunal Supremo, haré todo lo que pueda para minimizar la necesidad de abortos con una mejor educación sexual, planificación familiar y mejores procedimientos de adopción. Personalmente, no creo que el Gobierno federal deba financiar los abortos, pero no apoyo una enmienda constitucional. Respeto el derecho de las personas a solicitar una enmienda constitucional sobre el aborto, pero no trabajaré activamente para que se apruebe”.
Siendo presidente de los Estados Unidos, tuvo que hacer frente a la implementación de la sentencia Roe vs Wade (1973) que defendía que la Constitución de los Estados Unidos protegía la libertad de la mujer para abortar sin restricciones gubernamentales excesivas.
En su libro Nuestros valores en peligro, publicado en 2006, Carter se mostró “convencido de que cada aborto es una tragedia no planificada, provocada por una combinación de errores humanos, y éste ha sido uno de los problemas morales y políticos más difíciles a los que me he tenido que enfrentar. Como presidente, acepté mi obligación de hacer cumplir la sentencia del Tribunal Supremo Roe v. Wade y, al mismo tiempo, intenté por todos los medios posibles reducir al mínimo el número de abortos”.
Carter también apoyó la equiparación de la institución natural del matrimonio a las uniones entre personas del mismo sexo.
Según publicó The Huffington Post, los familiares de Carter explicaron que el expresidente cumplió el deseo de votar por Kamala Harris las pasadas elecciones presidenciales, siendo la candidata demócrata defensora del aborto sin límites.