Unos cien mil argentinos peregrinaron el fin de semana a la Basílica de la Virgen de Itatí y asistieron a una Misa celebrada en la explanada del santuario por el Arzobispo de Corrientes, Mons. Domingo Salvador Castagna.
Los caminantes, en su gran mayoría jóvenes del nordeste argentino, recorrieron más de 70 kilómetros para arribar a la localidad correntina con ocasión de la 25ta. edición de la Peregrinación Juvenil a Itatí.
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En su homilía, Mons. Castagna destacó que existe "una sociedad alternativa, la otra Argentina, la que queremos, porque así como están las cosas esto no da más"
"Tenemos una misión, una vocación, quiere decir que hemos sido llamados por Dios para algo, para poner cada uno de nosotros, nuestra parte, por pequeña que sea, para construir este mundo mejor", señaló el Obispo y precisó que "parece que quieren que desaparezcan los pobres, como se dijo en tiempos de (Carlos) Menem; en vez de hacer desaparecer la pobreza, en vez de luchar contra la pobreza, la emprendieron contra los pobres".
También pidió “empezar a ser honrados, honestos, no entrar en ese juego de la corrupción que por desgracia se generalizó tanto".
Las delegaciones participantes llegaron de Rosario, Santa Fe, Buenos Aires, Córdoba y de Asunción del Paraguay, además de Chaco, Formosa, Corrientes y Misiones. El lema de este año fue "Con Jesús Eucaristía, transformemos el país".