Católicos exiliados de Nicaragua agradecieron al Papa Francisco la carta que envió hoy a la Iglesia Católica en el país centroamericano, que consideraron un “bálsamo para nuestro espíritu” y un importante aliento, ante la persecución que sufren de la dictadura de Daniel Ortega y su "copresidenta" Rosario Murillo.

Este 2 de diciembre el Papa Francisco envió una carta a los católicos de Nicaragua, en la que los anima a tener la certeza de que la fe y la esperanza “realizan milagros”.

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Félix Maradiaga, laico católico de la Diócesis de Matagalpa y presidente de Fundación para la Libertad de Nicaragua, expresó su “más profunda gratitud a Su Santidad el Papa Francisco por la carta”.

“En medio de esta oleada de represión y persecución religiosa sin precedentes en nuestra historia, sus palabras de aliento son un bálsamo para nuestro espíritu y un recordatorio de la fuerza transformadora de la fe y la esperanza”, indicó Maradiaga a ACI Prensa.

El también excandidato presidencial y ex preso político resaltó que “la cercanía pastoral del Santo Padre reafirma nuestra confianza en la Providencia divina, aun cuando enfrentamos pruebas y desafíos que parecen insuperables”.

Maradiaga destacó, además, que la cercanía del Papa y la devoción a la Inmaculada Concepción “nos llenan de consuelo y determinación”, en medio de “un pueblo que, a pesar de la oscuridad, sigue proclamando la luz del Evangelio”.

Para Martha Patricia Molina, autora del informe Nicaragua ¿Una Iglesia perseguida? que da cuenta de 870 ataques de la dictadura contra la Iglesia Católica entre 2018 y 2024, la carta del Papa Francisco revela que “da seguimiento y atención a la grave situación que enfrenta Nicaragua”.

“En este momento todo lo que sea escrito por la Conferencia Episcopal de Nicaragua sería motivo para la dictadura sandinista para continuar expulsando a obispos y el Papa Francisco sabe eso y siento que por eso nos envía ese bello mensaje”, prosigue la experta, en declaraciones a ACI Prensa.

“Nuestro pueblo es mariano y estamos en estas fechas rezando la novena a la Purísima Concepción. Recibir esta carta pastoral del Papa Francisco en estas fechas especiales es un regalo de Dios”, agrega.

El mecánico industrial Pedro Gutiérrez, deportado a Guatemala en septiembre de este año, comentó a EWTN Noticias que “hubiésemos querido los nicaragüenses –yo sé que muchas personas en el mundo también– que el Papa Francisco fuera más contundente, más fuerte, más enérgico contra esta dictadura, contra estos criminales, porque eso es lo que son”.

Tras comparar al Papa Francisco con San Juan Pablo II, que “se enfrentó a dictadores, a grandes tiranos”, Gutiérrez le pidió al Pontífice “que no calle antes las injusticias que están cometiendo estos criminales contra la propia Iglesia Católica”.

“Quisiéramos un Papa Francisco que defienda a la Iglesia Católica, que dé la cara por la Iglesia Católica”, aseguró.