Por Daniel Payne
Un párroco en Brooklyn, Nueva York (Estados Unidos), ha sido removido de su parroquia después de que una revisión encontró presuntas violaciones financieras “graves”, incluida una transferencia secreta de fondos parroquiales por un total de casi 2 millones de dólares estadounidenses.
El Obispo de Brooklyn, Mons. Robert Brennan, dijo en un comunicado esta semana que había relevado a Mons. Jamie Gigantiello de “cualquier supervisión pastoral o papel de gobierno” en la parroquia de Our Lady of Mount Carmel-Annunciation después de que una revisión externa encontrara “evidencia de graves violaciones de las políticas y protocolos diocesanos”.
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Mons. Brennan ya había sancionado a Mons. Gigantiello el año pasado, después de que el sacerdote permitiera a la estrella del pop Sabrina Carpenter grabar un video musical lascivo en la iglesia. En esa ocasión, el prelado relevó al párroco de la supervisión administrativa de la parroquia.
La destitución de Gigantiello del cargo de párroco esta semana se produjo después de que las investigaciones revelaran que supuestamente “manejó mal fondos sustanciales de la iglesia e interfirió con la administración de la parroquia después de haber recibido instrucciones de no hacerlo”, dijo Mons. Brennan en su comunicado.
Entre 2019 y 2021, el sacerdote presuntamente transfirió 1,9 millones de dólares de fondos parroquiales a cuentas bancarias vinculadas al abogado Frank Carone, una figura de larga trayectoria en la política demócrata de Brooklyn. Carone se desempeñó como jefe de gabinete del alcalde de Nueva York, Eric Adams, en 2022.
No está claro para qué Carone o sus afiliados pudieron haber usado el dinero. La diócesis indicó en su comunicado que los préstamos fueron pagados, uno de ellos a un interés de alrededor del 9%.
La diócesis dijo que hubo “otros casos” en los que Mons. Gigantiello malversó los fondos de la parroquia, incluido el uso de una tarjeta de crédito de la iglesia para “gastos personales sustanciales”.
Además de destituir a Gigantiello, Mons. Brennan dijo que también había puesto al diácono Dean Dobbins, administrador temporal de la parroquia, en licencia administrativa.
La diócesis dijo que a principios de mes había recibido evidencia de los abogados de Gigantiello de “comentarios racistas y otros ofensivos” hechos por Dobbins “durante conversaciones privadas en la oficina parroquial”.
Los comentarios fueron grabados en secreto “por orden de [Gigantiello]”, dijo la diócesis.
“Fue un error grabar en secreto al diácono Dobbins, pero el uso de ese lenguaje por parte de cualquier empleado de la iglesia es inaceptable y no será tolerado”, dijo Mons. Brennan en su comunicado.
La diócesis dijo que está “totalmente comprometida a cooperar con las fuerzas del orden en todas las investigaciones”.
Además de su destitución del liderazgo de la parroquia de Brooklyn, Gigantiello el año pasado también fue destituido de su cargo de vicario diocesano para el desarrollo, puesto que había ocupado durante unos 15 años.
A principios de este año, Carpenter había bromeado sobre su supuesto papel en ayudar a lanzar investigaciones federales sobre los líderes de la ciudad de Nueva York, específicamente Adams, quien fue acusado de delitos financieros en septiembre.
En un concierto en el Madison Square Garden días después de que el alcalde fuera acusado, la cantante sugirió que la controversia del año pasado por el video musical filmado en la iglesia de Brooklyn podría haber llevado a que Adams fuera blanco de agentes federales.
“¿Deberíamos hablar de cómo logré que acusaran al alcalde?”, preguntó a su audiencia en el concierto.
Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA.
Daniel Payne es editor senior de Catholic News Agency. Anteriormente trabajó en College Fix y Just the News. Vive en Virginia con su familia.
