Reunidos en su 125ª Asamblea, los obispos argentinos enviaron una carta al Papa Francisco en la que le agradecen por el significativo Sínodo de la Sinodalidad, por el “regalazo” de la exhortación Dilexit Nos, y se muestran “abiertos y deseosos” de su visita al país.

Desde la casa de retiros “La Montonera”, en la ciudad bonaerense de Pilar, los miembros de la Conferencia Episcopal Argentina compartieron con el Santo Padre su alegría por la renovación de la Comisión Ejecutiva y las demás comisiones episcopales, proceso que, aseguran, se vivió “en espíritu sinodal y fraterno”.

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En la misiva, los obispos agradecen al Papa por “todo lo que ha significado para la Iglesia el Sínodo de la Sinodalidad, que ahora nos interpela a transmitirlo, a hacerlo accesible a nuestro pueblo, y a encarnarlo en gestos concretos de servicio”.

También hacen mención del “regalazo” de la encíclica Dilexit Nos, publicada recientemente y dirigida a la Iglesia universal, “pero que tiene para nosotros un aire a nuestra tierra, un aire de familia, además de la autoría en parte de nuestro querido Diego Fares, que nos significa una verdadera caricia al corazón”, afirman, en referencia al sacerdote argentino fallecido en 2022, cuyos escritos inéditos inspiraron gran parte del documento papal.

Dicha caricia y ternura, admiten los obispos, “andamos necesitando experimentar nosotros para transmitir a nuestra gente, muy golpeada por la pobreza, la inseguridad, la falta de trabajo, la incertidumbre”, al tiempo que reconocen que “esos más sencillos, más vulnerados, más olvidados, son verdaderos maestros y maestras de esperanza”.

Para finalizar, desde el Episcopado se muestran “siempre abiertos y deseosos de tu visita a esta tu tierra que te ama y espera”.

“Rezamos por vos y te pedimos la bendición para la nueva Comisión Ejecutiva y para todos nosotros, los obispos, que, aunque frágiles, queremos servir mejor a nuestra Iglesia que peregrina en Argentina”, concluyen, con “un abrazo en Cristo y su Madre Santísima, Nuestra Señora de Luján” a quien este viernes visitarán en su santuario para ofrecer la Eucaristía, agradecerle y pedirle su protección.