El Papa Francisco anunció el sábado que San Isaac de Nínive, un obispo asirio del siglo VII venerado en diversas tradiciones cristianas, será incluido en el Martirologio Romano.
El Pontífice hizo este anuncio en el marco de un encuentro en el Vaticano con Mar Awa III, Catholicos-Patriarca de la Iglesia Asiria de Oriente.
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La reunión, celebrada el 9 de noviembre, conmemoró dos hitos: casi 30 años desde la firma de la Declaración Cristológica Común, que puso fin a una disputa doctrinal de 1.500 años, y 40 años desde el primer encuentro histórico entre un Papa y un patriarca asirio.
Citando la Unitatis Redintegratio del Concilio Vaticano II, el Papa Francisco subrayó que ambas Iglesias comparten “la misma fe, transmitida por los apóstoles”, aunque se expresen de manera diferente.
El Santo Padre destacó los logros recientes en el diálogo católico-asirio, como el acuerdo de 2001 sobre la Anáfora de Addai y Mari, una antigua plegaria eucarística reconocida por sus raíces apostólicas, y la declaración conjunta de 2017 sobre la vida sacramental.
Un documento de 2022 titulado Las Imágenes de la Iglesia en las Tradiciones Patrísticas Siriaca y Latina estableció nuevas bases para el entendimiento mutuo.
“El diálogo teológico es indispensable en nuestro camino hacia la unidad”, afirmó Francisco. “La unidad que anhelamos es unidad en la fe”, añadió, subrayando que este diálogo debe estar fundamentado en la verdad y la caridad.
La decisión del Papa Francisco de agregar a San Isaac al Martirologio sigue una recomendación reciente del Sínodo de la Sinodalidad de reconocer santos de otras tradiciones cristianas en el calendario litúrgico católico.
Al referirse a la difícil situación de los cristianos en Medio Oriente, el Papa Francisco rezó por su testimonio continuo en una región marcada por conflictos.
“Por intercesión de San Isaac de Nínive, unido a la de la Santísima Virgen María, Madre de Cristo, nuestro Dios y Salvador, que los cristianos de Medio Oriente siempre den testimonio de Cristo resucitado en esas tierras devastadas por la guerra”, dijo.
San Isaac de Nínive, también conocido como Isaac el Sirio, fue un místico cristiano, monje y obispo de gran influencia, celebrado por sus profundas enseñanzas sobre el ascetismo, la compasión y la vida espiritual interior, influyendo profundamente en la espiritualidad cristiana en Oriente y Occidente.
Francisco cerró el encuentro invitando a todos los presentes a rezar el Padrenuestro en sus propias lenguas y tradiciones, resaltando la herencia espiritual compartida que une a estas antiguas Iglesias.
Al agregar a San Isaac de Nínive al Martirologio Católico, el Papa Francisco señaló que esto es un recordatorio de las raíces comunes y de la fe compartida entre ambas Iglesias, una que ha perdurado a través de siglos de separación.
Publicado originalmente en CNA. Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa.