“El hombre propone y Dios dispone”, dijo el Cardenal Marcello Semeraro en la Misa de clausura del Año Jubilar por los 125 años de la muerte de la Beata española Carmen del Niño Jesús, fundadora de las Hermanas Franciscanas de los Sagrados Corazones.

La imitación de Cristo, del que se dice es el libro más leído después del Evangelio, afirma lo que se ha convertido en un proverbio: ‘el hombre propone, pero es Dios quien dispone’”, resaltó el prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos este domingo en la iglesia de Nuestra Señora de los Remedios, en Antequera, Málaga (España).

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En ese sentido, el purpurado italiano –que presidió ayer en Sevilla la Misa de beatificación del Padre José Torres Padilla– destacó que “el corazón del hombre hace sus planes, pero es el Señor quien hace firmes sus pasos. El hombre hace sus planes y también sus opciones y estas son de diversa índole, a veces buenas otras no, pero es Dios quien, en cada paso, dirige su vida”.

“Nadie es nunca tan pobre que no pueda dar algo”

En otro momento de la homilía, el prefecto resaltó algo que puede ser paradójico: “nadie es nunca tan pobre que no pueda dar algo. El Papa Francisco dijo una vez que la persona hambrienta necesita no sólo un plato de sopa, sino también una sonrisa, ser escuchada e incluso una oración tal vez”.

“El Evangelio de hoy nos invita a proyectarlo no sólo a las urgencias de nuestros hermanos más necesitados y pobres, sino sobre todo estar atentos a su necesidad de cercanía fraterna, de sentido, de ternura”, remarcó luego, al hablar de la viuda pobre del Evangelio que lo da todo para la ofrenda y la viuda que obedece a Elías y no pasa hambre por mucho tiempo.

“Los pobres son los únicos capaces de dar la verdad. Vosotras queridas hermanas, tenéis el testimonio de vuestra fundadora. Los santos no están sólo para ser invocados y honrados, sino ante todo para ser imitados”, subrayó el Cardenal Semeraro.

¿Quién es la Beata Carmen del Niño Jesús?

La Beata Carmen del Niño Jesús es la fundadora de las Terciarias Franciscanas de los Sagrados Corazones de Jesús y María.

Nació en Antequera, Málaga, el 30 de junio de 1834. A los 22 años se casó con Joaquín Muñoz del Caño. Iba a Misa diaria, hacía obras de caridad y rezada mucho. Era miembro de la Conferencia de San Vicente de Paul, de donde sacó fuerzas para afrontar su situación. Incluso llegó a dar sus bienes para salvar a su marido de un problema.

Veinte años después de casarse y tras haberla hecho sufrir mucho, Joaquín se convirtió. Falleció cuatro años después.

La Madre Carmen sintió luego el llamado de Dios. Tras años de búsqueda, el 8 de mayo de 1884, ayudada por su director espiritual fundó a las Hermanas Franciscanas de los Sagrados Corazones. El Cardenal Semeraro destacó la Beata fundó la congregación para “el socorro a los más necesitados, la ayuda hacia aquellos que por sí solos son incapaces de salir de la pobreza”.

“La vida terrena de nuestra Beata no fue fácil, desde su primera juventud hasta el final de su camino: en la familia, en el estado matrimonial y luego viuda, e incluso en la familia religiosa que fundó”, explicó el purpurado.

La Madre Carmen del Niño Jesús murió el 9 de noviembre de 1899 en el convento de Nuestra Señora de la Victoria, en Antequera, mirando la imagen de la Virgen del Socorro. Fue beatificada el 6 de mayo de 2007.