La reciente devastación causada por el huracán Óscar en el oriente de Cuba ha movilizado a Cáritas Habana a lanzar una campaña de ayuda humanitaria para asistir a las personas afectadas en la Diócesis de Guantánamo-Baracoa.

Los fuertes vientos y lluvias intensas que acompañaron al ciclón causaron serios daños a viviendas, cultivos e infraestructura vial, y el impacto en la comunidad fue tal que muchas familias “han perdido todo o casi todo lo que con tanto sacrificio habían conseguido”, según destaca el comunicado oficial de Cáritas publicado el 25 de octubre.

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Para coordinar los esfuerzos de ayuda, Cáritas Habana ha dispuesto su oficina arquidiocesana en La Habana, ubicada en Calzada #553, entre Calle C y Calle D, Vedado, como centro de acopio de donaciones.

En su comunicado, la organización informa que recibirán donativos de lunes a viernes entre las 10:00 a. m. y las 2:00 p.m. (hora local) Entre los artículos que pueden donar se incluyen “ropa, zapatos, alimentos perecederos (enlatados, granos, arroz, etc.), aseo, enseres de cocina, lámparas, bombillos recargables”.

Cáritas subraya la importancia de que los artículos estén en buen estado, pues “si bien la necesidad es mucha, también pensemos que esto no ayudaría en nada a nuestros hermanos”.

Además de la recolección de artículos esenciales, Cáritas Habana ha abierto dos cuentas bancarias para facilitar el envío de ayuda financiera. “Para las personas que deseen y puedan donar dinero, la Diócesis de Guantánamo-Baracoa ha puesto a disposición dos tarjetas, una en moneda nacional y otra en MLC”, precisa el comunicado, añadiendo los detalles de cada cuenta.

El mensaje, firmado por el Cardenal Juan de la Caridad García, Arzobispo de La Habana, y Ángel Miguel Gutiérrez, Director de Cáritas Habana, resalta el llamado a la solidaridad de los cubanos. “Invitamos a todo el que quiera unirse para llevar un rayo de esperanza y caridad a los hermanos de Guantánamo”, indica le mensaje.

La organización no sólo hace un llamado a donar sino también a acompañar a las familias damnificadas en oración, pidiendo a Dios que “consuele e interceda por los que lo han perdido todo”.

La campaña de Cáritas responde a la situación de emergencia que enfrenta la región oriental de Cuba, golpeada tanto por el huracán como por la reciente caída del Sistema Energético Nacional, que dejó a la población en una situación de mayor vulnerabilidad e incomunicada. La organización invita a que los donantes actúen con generosidad, “pensando en ayudar con dignidad a nuestros hermanos”.