La reliquia de la Cátedra de San Pedro, el trono de madera que simboliza el primado del primer Papa, será expuesta a los fieles; mientras que el monumental Baldaquino de Bernini será develado, tras su restauración en la Basílica Vaticana, en el marco de la conclusión del Sínodo de la Sinodalidad.

Las abejas de Barberini en el Baldaquino en restauración. Crédito: Daniel Ibáñez / EWTN News.
Las abejas de Barberini en el Baldaquino en restauración. Crédito: Daniel Ibáñez / EWTN News.

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De acuerdo a un comunicado de la Fábrica de San Pedro, la exposición de la Cátedra comenzará el domingo 27 de octubre, tras la Misa que presidirá el Santo Padre por la clausura del Sínodo.

Esta Eucaristía será la primera que se celebre en la Basílica de San Pedro con el Baldaquino de Bernini restaurado, el monumento que está sobre el altar central del emblemático templo.

“La Cátedra de madera podrá ser venerada y admirada en el Altar de la Confesión hasta el próximo 8 de diciembre, fiesta de la Inmaculada Concepción”, señala el texto.

Un ángel en el Baldaquino. Crédito: Daniel Ibáñez / EWTN News
Un ángel en el Baldaquino. Crédito: Daniel Ibáñez / EWTN News

El Papa Francisco autorizó esta veneración luego que el 2 de octubre, al inicio del Sínodo de la Sinodalidad, contemplara la Cátedra, junto al Cardenal Mauro Gambetti, Arcipreste de la Basílica de San Pedro.

“La Cátedra de Pedro nos habla de un encuentro, reunido en asamblea, de una Iglesia congregada en torno a su pastor, donde cada uno está llamado personalmente a seguir a Jesús, pero en un camino nunca individualista, sino siempre compartido e iluminado por los hermanos”, comenta el cardenal, según recoge el comunicado de la Fábrica de San Pedro.

¿Qué es la Cátedra de San Pedro?

La Cathedra Sancti Petri Apostoli, como se llama en latín, ha sido considerada por siglos como la sede (silla) episcopal de San Pedro: un trono de madera decorado con placas de marfil que representan los Trabajos de Hércules y seis constelaciones.

Según refiere Vatican News, la reliquia fue extraída de su monumental ‘relicario’ de bronce dorado, el Baldaquino o Monumento de Bernini, para permitir su restauración en el ábside de la Basílica, en el marco de las obras que se realizan con vistas al Jubileo de 2025.

La Cátedra de San Pedro vista de cerca. Crédito: Vatican News
La Cátedra de San Pedro vista de cerca. Crédito: Vatican News

En esta ocasión, la Cátedra se someterá a una serie de minuciosas investigaciones diagnósticas y cognitivas realizadas en colaboración y sinergia con el Gabinete de Investigación Científica Aplicada a los Bienes Culturales de los Museos Vaticanos.

Pietro Zander, jefe de la sección de la Necrópolis y del Patrimonio Artístico de la Fábrica de San Pedro del Vaticano, explica que “se trata de un asiento de madera muy antiguo, sin duda de la época carolingia”.

“Nos lo dicen las investigaciones científicas que se hicieron sobre la madera en 1974, pero también nos lo dice el propio asiento, porque en el centro hay un friso de marfil en el que se ve al emperador Carlos el Calvo, por tanto un emperador carolingio, coronado por dos ángeles. Fue coronado en el 875 aquí mismo, en la Basílica de San Pedro”.

Una imagen del proceso de restauración, con el Espíritu Santo de alabastro al fondo. Crédito: Daniel Ibáñez / EWTN News.
Una imagen del proceso de restauración, con el Espíritu Santo de alabastro al fondo. Crédito: Daniel Ibáñez / EWTN News.

“Esta sede puede tener elementos más antiguos, como los paneles de la parte frontal con los Trabajos de Hércules, con las constelaciones. Las investigaciones nos dirán si pueden atribuirse, como quieren algunos estudiosos, incluso al siglo III”, añade.

Zender precisa finalmente que “es posible que esta sede contenga los restos de una sede aún más antigua que por devoción popular, representando la primacía del Papa en la dirección de la Iglesia Universal, con el tiempo ha asumido también un valor devocional como reliquia y ha sido considerada la sede de Pedro”.