El senador JD Vance, candidato Republicano a la vicepresidencia de Estados Unidos, en un mitin religioso el 20 de octubre en Waukesha, Wisconsin, acusó a la administración Biden-Harris de perseguir a los cristianos y católicos en particular.

En su discurso, Vance también habló sobre la libertad religiosa y el impacto de la inflación, la inmigración ilegal y la adicción a las drogas.

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“Hay muchos católicos... [quienes] creo que con razón se sienten abandonados por el liderazgo de Joe Biden y Kamala Harris, y sólo están buscando a alguien que proteja sus derechos y haga de este país un lugar asequible y decente para criar una familia”, dijo Vance en el mitin del domingo por la tarde en el estado en disputa.

“Creo que eso es cierto para muchos católicos”, dijo Vance. “También es cierto para los no católicos. Pero no podemos tener un gobierno estadounidense que persiga a los cristianos por vivir su fe. Deberíamos recompensar a la gente y animarla a vivir su fe”.

Vance reprendió a Harris por su apoyo para “demandar a monjas católicas para obligarlas a realizar procedimientos que violan su conciencia”.

La acusación parece referirse al apoyo de Harris en 2019 a la Ley “Do No Harm, que habría puesto fin a las exenciones de libertad religiosa para ciertos mandatos gubernamentales, incluida la cobertura del seguro médico. Habría reducido las protecciones de la Ley de Restauración de la Libertad Religiosa para que el gobierno pudiera obligar a los empleadores religiosos a incluir la cobertura del aborto y las cirugías transgénero en sus planes de seguro médico.

Los legisladores Demócratas presentaron la legislación para hacer retroceder a las Hermanitas de los Pobres, una comunidad católica de religiosas que estaban demandando al gobierno federal por un mandato de que su plan de seguro médico cubriera el aborto. Las religiosas ganaron en la Corte Suprema.

“Creo que eso es ridículo”, continuó Vance. “Creo que somos un país lo suficientemente grande como para que realmente podamos respetar el derecho de las personas de fe a vivir de acuerdo con su conciencia y no tratar de imponer los valores progresistas de Kamala Harris”.

La campaña de Trump también ha criticado a Harris por su escrutinio a los nominados judiciales por ser miembros de los Caballeros de Colón y por un memorando interno filtrado del FBI de Richmond que pedía una investigación sobre un supuesto vínculo entre los llamados “católicos tradicionalistas radicales” y “el movimiento nacionalista blanco de extrema derecha”. Trump también criticó a Harris por no asistir a la cena Al Smith, que recauda dinero para organizaciones benéficas católicas y a la que tradicionalmente asisten los dos candidatos de los principales partidos.

“Kamala Harris es la candidata del fanatismo anticristiano y anticatólico”, dijo Vance. “Ella se jacta de ello. Ese es su historial político. Donald Trump es el candidato que defenderá el derecho de la Primera Enmienda a practicar su fe como deseen, porque esto es Estados Unidos de América, y creemos en la libertad religiosa en este país”.

Vance también culpó a Harris y al presidente Joe Biden por el aumento del costo de vida, resultado de los altos niveles de inflación. Culpó al gasto gubernamental por la inflación, que dijo que perjudicó a las familias e “hizo que los alimentos fueran inasequibles para los ciudadanos estadounidenses”.

Además, Vance culpó a Biden y Harris por la avalancha de migrantes que ingresan ilegalmente a Estados Unidos. Dijo que sus políticas fronterizas han hecho que los estadounidenses estén menos seguros y han provocado un aumento de las drogas mezcladas con fentanilo en el país.

En una nota personal, Vance se refirió a la lucha pasada de su madre con la adicción a los opioides, diciendo que “ha estado limpia y sobria durante 10 años, y estamos orgullosos de ella”.

“Eso, para mí, es la gracia de Dios”, dijo. “Sé que en esta sala, [muchas personas] creen que Dios a veces obra de maneras misteriosas, pero obra todos los días en la vida de los ciudadanos de este estado y de este país. Soy la prueba viviente de ello, amigos míos”.

“Pero mientras rezamos a Dios por una recuperación y luchamos todos los días por aquellos de nuestros seres queridos que están siendo atrapados en esta situación, ¿no sería bueno tener un presidente de los Estados Unidos que impidiera que este veneno entrara a nuestro país en primer lugar?”, agregó Vance.

Cientos de personas asistieron al mitin de Vance, que tuvo lugar en las afueras de Milwaukee, la ciudad más grande del estado. Varias personas sostenían carteles de campaña que decían “Católicos por Trump”. Vance es un converso al catolicismo y señaló durante el discurso que fue “bautizado por primera vez en 2019” y “volví a mi fe cuando era joven”.

“Sé que todos ustedes están rezando por mí, y sé que tenemos muchos católicos a favor de Trump”, dijo Vance. “Veo los carteles aquí. Gracias, católicos por Trump”.

Mientras hablaba, un asistente gritó en voz alta “Jesús es el rey”, a lo que Vance respondió: “Así es, Jesús es el rey”, y recibió fuertes vítores y aplausos de la multitud. Esto parecía ser en referencia a un incidente que tuvo lugar en un mitin de Harris dos días antes. Dos estudiantes universitarios dicen que se les pidió que abandonaran un mitin de Harris después de haber gritado, al parecer, “Jesús es el Señor”. Sin embargo, un video que circula en las redes sociales muestra que alguien del público también gritó “¡mentiroso! ¡mentiroso!” antes de que Harris les dijera que estaban “en el mitin equivocado”.

“Ya sea que seas una persona de fe cristiana o no, Donald Trump y yo vamos a luchar por tu derecho a vivir tus valores porque eso es lo que protege la Primera Enmienda”, dijo Vance.

Según un promedio de encuestas de RealClearPolling, Trump y Harris están prácticamente empatados en Wisconsin, un estado con 10 votos del Colegio Electoral. En los siete estados disputados con las contiendas más reñidas, las encuestas muestran a Trump con ventajas muy estrechas, con Harris a menos de dos puntos porcentuales de distancia en cada uno, muy dentro del margen de error.

Algunas encuestas recientes muestran que los votantes católicos están divididos casi en partes iguales sobre las elecciones presidenciales de 2024. Según una encuesta del Pew Research Center de septiembre, alrededor del 52% de los católicos apoya a Trump y el 47% a Harris. Una encuesta realizada por el National Catholic Reporter encontró que los católicos en los siete estados indecisos más disputados preferían a Trump en un 50% frente al 45% de Harris.

Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA.