¿Qué hay en la mochila de un padre sinodal?

El Obispo de La Rioja (Argentina), Mons. Dante Braida, quien por estos días participa de la Asamblea Sinodal en Roma, compartió el contenido de la mochila que lleva cada día a las sesiones.

Se trata de una mochila azul que fue entregada a los 368 participantes de la asamblea, con algunos elementos que ya estaban incluidos, como el Instrumentum laboris o documento de trabajo del Sínodo, una botella con el logo del Jubileo 2025 y el lema “Peregrinos de Esperanza”, el reglamento de la asamblea sinodal y los horarios de las actividades.

Además, traía dentro la credencial que identifica a los miembros del Sínodo, y una “mochila digital”, una tablet con los documentos con los que trabajan día a día, un libro de oración y las ponencias que se van desarrollando, como también lo trabajado en los grupos.

A estos elementos “oficiales”, Mons. Braida le agregó los propios, dándole a su mochila un toque personal.

En primer lugar, un bolígrafo de color azul. También le sumó su laptop, y un par de auriculares para escuchar las traducciones en simultáneo de las ponencias.

El obispo lleva además un ejemplar de la Biblia, junto con una estampa del Beato Enrique Angelelli, quien fue Obispo de La Rioja y padre conciliar.

El prelado añadió también su agenda con las reflexiones sobre el Sínodo que fue elaborando durante el año.

Como buen argentino, también incluyó en su mochila sinodal su equipo de mate, y en el termo donde transporta el agua se aprecian stickers de la Diócesis de La Rioja.

En el bolsillo, Mons. Braida lleva un regalo especial: el rosario que cada uno de los sinodales recibió, regalo del P. Timothy Radcliffe, predicador del retiro previo a la Asamblea, quien les recomendó su rezo diario, para encomendar el sínodo a la protección de la Virgen.

Junto con sus cosas materiales, afirmaron desde la diócesis, Mons. Braida “lleva lo que vive a diario como pastor” y  “la enseñanza de Monseñor Angelelli”, que constituyen el mensaje que tiene para compartir en el Sínodo.

Para acompañar este tiempo sinodal, la Secretaría General del Sínodo obsequió a los participantes una caja de chocolates en una bolsa cosida a mano, con el mensaje: “Caminemos Juntos”.

Los dulces fueron elaborados en la Escuela Taller de Cacao Kharis, que emplea a adultos jóvenes de Venezuela, y las bolsitas son confección de mujeres del centro comunitario Construyendo Futuro, de ese país.

Esta segunda parte del Sínodo de la Sinodalidad comenzó el miércoles 2 de octubre, y concluirá el domingo 27 de octubre, con una Misa que presidirá el Papa Francisco. Al inicio del Sínodo, en octubre de 2021, el Santo Padre aseguró que esta instancia "no es un parlamento" o "un sondeo de las opiniones", sino que constituye “un momento eclesial, y el protagonista del Sínodo es el Espíritu Santo”.