En un discurso ante la “Cumbre del Futuro” de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York, el Cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado de la Santa Sede, subrayó la necesidad de promover la dignidad humana y expresó el rechazo del Vaticano a la promoción del aborto y la ideología de género por parte de la asamblea.

El Cardenal Parolin se dirigió a los miembros de la ONU reunidos para la cumbre el lunes 23 de septiembre. Aunque elogió a los asistentes por participar en el diálogo, comentó que existe una “necesidad de replantear las acciones en varias áreas”.

Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram

Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:

El cardenal expresó las preocupaciones del Vaticano sobre el documento titulado “Pacto por el Futuro”, aprobado por los asistentes a la cumbre el domingo. Dijo que “de conformidad con su naturaleza y misión particular, [la Santa Sede] desea expresar sus reservas” respecto a la promoción del aborto y la ideología de género por parte de la asamblea.

La Santa Sede mantiene el estatus de “observador permanente” sin derecho a voto en las Naciones Unidas.

¿Qué dijo el Cardenal Parolin?

El Cardenal Parolin enfatizó la necesidad de promover la dignidad de la persona humana en todo el mundo. Elogió la cumbre como una “razón para la esperanza” en medio de una crisis en la que se evidencia una “erosión de la confianza entre las naciones, como lo demuestra la creciente prevalencia e intensidad del conflicto”.

“Hoy, el sentido de pertenencia a una única familia humana se desvanece, y el sueño de trabajar juntos por la justicia y la paz parece anticuado y utópico. Esto no tiene por qué ser así, si existe la voluntad de participar en un diálogo genuino”, afirmó. “Si la dignidad es la base y el desarrollo humano integral es la meta de nuestro futuro, el diálogo es el medio necesario”.

Aunque el “Pacto para el Futuro” aprobado en la cumbre no menciona explícitamente el aborto, establece el objetivo de “garantizar el acceso universal a la salud sexual y reproductiva y los derechos reproductivos”. Los términos “salud reproductiva” y “derechos reproductivos” suelen referirse a una variedad de servicios de salud, principalmente para mujeres, que a menudo incluyen el aborto.

“Con respecto a los términos ‘salud sexual y reproductiva’ y ‘derechos reproductivos’, la Santa Sede considera que estos términos se refieren a un concepto holístico de salud, que abarca, cada uno a su manera, a la persona en su totalidad de personalidad, mente y cuerpo, y que fomentan la madurez personal en la sexualidad y en el amor y la toma de decisiones mutuas que caracterizan la relación conyugal entre un hombre y una mujer de acuerdo con las normas morales”, explicó el Cardenal Parolin.

“La Santa Sede no considera el aborto ni el acceso al aborto o a los abortivos como una dimensión de estos términos”, aclaró.

“Con referencia a ‘género’”, continuó el Cardenal Parolin, “la Santa Sede entiende el término basado en la identidad sexual biológica que es masculina o femenina”.

¿Qué otros temas enfatizó el Cardenal Parolin?

El purpurado destacó la creencia del Vaticano de que la “erradicación de la pobreza” en el mundo debe ser el “objetivo principal de toda acción futura”.

También subrayó la necesidad de perseguir la paz mediante el desarme armamentístico y la “eliminación total de las armas nucleares”, afirmando que “deben dejarse de lado las consideraciones geopolíticas estrechas y deben resistirse los fuertes lobbies económicos para defender la dignidad humana y garantizar un futuro en el que todos los seres humanos puedan disfrutar de un desarrollo integral, tanto a nivel individual como comunitario”.

Finalmente, el Cardenal Parolin también mencionó que existe una “necesidad urgente” de que los gobiernos regulen el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) para promover una “ética de la IA que abarque el ciclo de vida de la inteligencia artificial y aborde, entre otras cosas, la protección de datos, la responsabilidad, los sesgos y el impacto de la IA en el empleo”.

“Sobre todo”, continuó el Cardenal Parolin, “debe tenerse en cuenta las necesidades e intereses de las futuras generaciones”.

“Es imperativo que se garantice un futuro digno para todos, asegurando las condiciones necesarias, incluido un entorno familiar propicio, para facilitar el florecimiento, mientras se abordan los numerosos desafíos que lo impiden, incluidos los derivados de la pobreza, el conflicto, la explotación y la adicción”, concluyó.

Traducido y adaptado por ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA.