Al culminar la Eucaristía de clausura del 53º Congreso Eucarístico Internacional en Quito (Ecuador), se anunció la que será la próxima sede del evento: Sydney (Australia).

La Misa fue presidida por el Cardenal Baltazar Porras, Arzobispo Emérito de Caracas (Venezuela) y Legado Pontificio del Congreso Eucarístico Internacional.

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Al finalizar la ceremonia, el Cardenal Porras dijo: “en nombre y por mandato del Papa Francisco, les anunció que el 54º Congreso Eucarístico Internacional tendrá lugar en la ciudad de Sydney (Australia)”, en 2028.

Sydney fue la sede del 29º Congreso Eucarístico Internacional en 1928.

El papel de la Eucaristía en la naciente Iglesia en Sydney

En un video compartido en el evento, el Arzobispo de Sydney, Mons. Anthony Fisher, se mostró “encantado de invitarlos a todos a nuestra ciudad portuaria en 2028 (...) 100 años después de que Sydney fuera sede de este gran evento”.

“La historia de la fe católica en Sydney es en muchas formas una historia del poder de la Eucaristía en construir la Iglesia de Dios desde inicios humildes”, recordó, señalando que “a los inicios del periodo colonial de nuestra ciudad, en los tiempos cuando no había clero y el culto católico estaba prohibido, fue el Santísimo Sacramento contenido en una píxide en la casa de un laico que sostuvo a los fieles”.

La hostia, señaló, fue dejada ahí por el P. Jeremiah O'Flynn “antes de su deportación”, y “sirvió como centro de nuestra primera comunidad católica. Ahí, en una pequeña habitación en una casa simple, hombres, mujeres y niños se reunían para adorar la presencia del Señor entre ellos”.

“Una gran ocasión de gracia”

En declaraciones a ACI Prensa, Mons. Danny Meagher, Obispo Auxiliar de Sydney, aseguró que “necesitamos que la vida en la Iglesia de Sydney florezca. El Arzobispo Anthony Fisher, reconociendo la importancia del Congreso Eucarístico Internacional, espera que sea un gran éxito, no sólo para Sydney y Australia, sino también para todos los que participen”.

“Deseamos que sea una gran ocasión de gracia para todos los asistentes, para que regresen a sus hogares con un verdadero sentido de la gracia, formados y transformados por lo que han aprendido”, expresó.

El prelado señaló que “el desafío para nosotros es organizar un muy buen Congreso Eucarístico Internacional, y yo mediría el éxito si logramos que los corazones de las personas sean tocados y sus mentes abiertas a la riqueza de la Eucaristía, adentrándonos en Dios”.

“Cristo nos entrega su vida, nos introduce en su misterio pascual y nos envía al mundo. A través de presentaciones de calidad que toquen la mente con buena teología, y que también conecten con el corazón y el espíritu mediante una buena liturgia y entretenimiento, buscamos que la gente esté realmente comprometida", expresó.