En el marco del 453° aniversario del departamento de Santa Cruz de la Sierra, la Basílica Menor de San Lorenzo, catedral metropolitana de la arquidiócesis, recibió un reconocimiento por su “valor espiritual y comunitario”: fue declarada Patrimonio Arquitectónico, Urbanístico y Eclesiástico Municipal.

El acto se realizó este miércoles en la Quinta Municipal y contó con la presencia de autoridades eclesiásticas, entre ellas el Nuncio Apostólico en Bolivia, Mons. Fermín Emilio Sosa; y el Obispo Auxiliar de Santa Cruz, Mons. Estanislao Dowlaszewicz; además de personalidades políticas y civiles, y público en general.

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Allí, el alcalde Jhonny Fernández fue el encargado de entregar el documento con la ley que declara Patrimonio Arquitectónico, Urbanístico y Eclesiástico Municipal de Santa Cruz de la Sierra a la catedral, y afirmó: “Esta ley reconoce el valor histórico y cultural de nuestra Catedral y también nos compromete a proteger y cuidar este patrimonio que es de todos los cruceños y bolivianos”.

El mandatario local hizo entrega también de la documentación en regla de 52 inmuebles de servicio religioso pertenecientes a la arquidiócesis, lo que le otorga seguridad jurídica para desarrollar actividades sociales y religiosas.

Este reconocimiento local es el primer paso para postular a la catedral —una de las más importantes de América Latina— ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), con el propósito de que en el futuro pueda ser declarada Patrimonio de la Humanidad.

Al referirse a esta distinción, Mons. Sosa expresó: “Como católicos, la catedral es la iglesia madre de todas las otras iglesias, es el centro donde podemos decir que Dios se manifiesta a su pueblo”. Por eso, “declararla patrimonio eclesiástico es un símbolo muy grande para poder manifestar la importancia que tiene la espiritualidad en nuestra vida, en la construcción de una comunidad que ayuda en el desarrollo de las personas humanas”.

Mons. Dowlaszewicz, por su parte, destacó que la catedral “no sólo es un lugar de culto, sino también un centro cultural y social que refleja la riqueza histórica y espiritual de Santa Cruz”. 

“Este reconocimiento es un homenaje a la dedicación y esfuerzo de la comunidad y la Iglesia”, afirmó.

Historia de la Catedral de Santa Cruz

La primera iglesia fue construida en 1595, y reconstruida en cuatro oportunidades a lo largo de los siglos, superando cada vez más sus dimensiones debido a la creciente población.

La edificación actual fue realizada entre 1839 y 1915. Ante las dificultades económicas durante su construcción, los católicos locales colaboraron con ladrillo y piedra para que la obra pudiera continuar. Su arquitectura combina estilos coloniales y neoclásicos.

En 1989, el Papa Juan Pablo II la elevó a Basílica Menor.

Allí, además de profesar el culto católico, las personas que la visitan pueden conocer el museo, con una valiosa colección de más de cuatro siglos de arte, que incluye obras religiosas y culturales, objetos de plata y de madera, vestimentas y ornamentos religiosos.