Durante las últimas semanas, México ha sido testigo de un intenso debate en torno a la reforma constitucional que afectaría al Poder Judicial, impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, fundador del partido político Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA).
Esta reforma propone modificar de manera significativa la estructura y el funcionamiento de los órganos de justicia en el país.
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A continuación, presentamos algunas claves para entender esta reforma.
1. Es una propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador
La reforma al Poder Judicial es uno de los pilares del paquete de 20 iniciativas que el presidente López Obrador presentó el 5 de febrero de 2024, durante el Día de la Constitución. En su discurso, el mandatario destacó que el Poder Judicial “no puede seguir siendo un conjunto de instituciones al servicio de intereses políticos y económicos”.
El presidente subrayó que el Poder Judicial debe “asumir su papel de garante de la justicia y hacer valer un auténtico Estado de derecho, en el cual nada ni nadie se sitúe al margen de la ley o por encima de ella”
2. Estos son los principales cambios que propone
La reforma plantea una reestructuración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), eliminando las pensiones vitalicias de los ministros y ajustando sus salarios al tope máximo permitido para el presidente.
Asimismo, propone que jueces y magistrados, tanto a nivel federal como local, sean elegidos por voto popular.
Uno de los aspectos más polémicos de la iniciativa es la propuesta de "resguardar la identidad de las personas juzgadoras", introduciendo la figura de los llamados "jueces sin rostro", diseñada para proteger a los magistrados que se enfrenten a casos de delincuencia organizada.
3. Aún no ha sido aprobada definitivamente
La Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, el órgano legislativo federal de México, aprobó la reforma judicial el 4 de septiembre de 2024, en una sesión realizada en una sede alterna debido a bloqueos de trabajadores del Poder Judicial. Sin embargo, aún falta la aprobación del Senado.
Según Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado, la discusión de la iniciativa comenzará el 10 de septiembre, con la votación programada para el día 11.
4. Algunas de las críticas a la reforma judicial
La ministra presidenta de la SCJN, Norma Lucía Piña Hernández, expresó su preocupación el pasado 8 de julio, señalando que de aprobarse los cambios “no llegará la persona más calificada al puesto (…) sino la más popular, la que supo relacionarse bien con los puestos de poder”.
También el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, ha expresado su preocupación por la reforma judicial, advirtiendo que “representa un riesgo mayor para el funcionamiento de la democracia en México”. Salazar también señaló que las propuestas incluidas en la reforma propuesta “amenazan la histórica relación comercial” entre México, Estados Unidos y Canadá.
5. Mensajes a favor de la reforma
La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, militante de MORENA, apoya firmemente la reforma. En sus redes sociales señaló que “la reforma al Poder Judicial no afecta ni nuestras relaciones comerciales, ni las inversiones privadas, nacionales, ni extranjeras”. “Por el contrario”, dijo, “habrá más y mejor estado de derecho y más democracia para todas y todos”.
Otros políticos conocidos, como Marcelo Ebrard —también de MORENA y ex secretario de Relaciones Exteriores de López Obrador— y Juan Ramón de la Fuente —que fue representante de México ante las Naciones Unidas entre 2018 y 2023—, también respaldan la iniciativa, argumentando que busca mejorar la transparencia y eficiencia del sistema de justicia. En respuesta a un editorial crítico de The Washington Post sobre la reforma, Ebrard y de la Fuente afirmaron que la reforma tiene el propósito de fortalecer el Poder Judicial.
6. ¿Qué dice la Iglesia Católica?
En un comunicado difundido el 5 de septiembre, la Conferencia del Episcopado Mexicano advirtió que la iniciativa de reforma constitucional que afecta al Poder Judicial en México, aprobada por la Cámara de Diputados y enviada al Senado para su análisis y votación, no garantiza “una mejor y más cualificada impartición de justicia; más aún, afecta la autonomía del Poder Judicial”.
Los obispos mexicanos pidieron a los senadores “reflexionar con profundidad” la propuesta de reforma, “más allá de partidismos innecesarios, contemplando el bien de la Nación”.
El P. Mario Ángel Flores Ramos, ex rector de la Universidad Pontificia de México, consultor de la Comisión Teológica Internacional y director del Observatorio de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), expresó su preocupación por la reforma. El sacerdote dijo a ACI Prensa que “lo que van a hacer es desestructurar el Poder Judicial y con ello se acabó el pluralismo y se acabó el equilibrio de poderes y se acabó la democracia”.