“Más de 50.000 abortos se están ejecutando en Colombia en este año”, por lo que esta práctica es la amenaza más grande para la paz del país, ha señalado el director nacional de la plataforma ciudadana Unidos por la Vida, Jesús Magaña, en un evento llevado a cabo ayer en Bogotá.
El líder provida hizo esta denuncia ante las miles de personas congregadas ayer en la plaza de Bolívar para participar de la movilización y oración ecuménica por la paz del país, convocada por el movimiento ecuménico JC2033 y que contó con el apoyo del Episcopado colombiano.
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Magaña indicó a los asistentes que el gran número de niños abortados es equivalente a cuatro veces la capacidad de la principal plaza del país. “Esta es la peor violencia que se ejecuta contra las personas más indefensas, las más inocentes, contra nuestros niños por nacer”, expresó.
“Esto es muy triste y muy grave, porque con la muerte de estos niños por nacer, mueren sus papás, sus mamás, morimos todos, muere el país. Es por eso que afirmamos con seguridad que esta es la más grande violencia que está viviendo hoy el país. Y es un atentado contra el nombre de Jesús”, añadió.
En Colombia, que sigue padeciendo el accionar de grupos armados, se han registrado hasta el 29 de julio 41 masacres que han dejado 138 muertos.
Esto según el Observatorio de Derechos Humanos y Conflictividades de Indepaz que, de acuerdo a su sitio web, “entiende por masacre como el homicidio intencional y simultáneo de varias personas (3 o más personas) en estado de indefensión y en iguales circunstancias de modo, tiempo y lugar”.
“Hoy hemos marchado por Jesús —añadió Magaña—. Y si somos de Él, debemos preguntarnos todos los que estamos aquí, ¿qué estamos haciendo ante la amenaza más grande que sufre la paz hoy en Colombia? La amenaza más grande que hoy tenemos se llama el aborto provocado”.
El líder de Unidos por la Vida cuestionó que “si una mamá en su angustia paga por matar a su bebé, ¿cómo vamos a decir entonces que los grupos armados irregulares no maten por dinero? ¿O por placer o por poder? Necesitamos parar esta masacre de los más inocentes, de los más indefensos”.
Por ello, invitó a rezar y a pedir a los magistrados de la Corte Constitucional “que cambien sus sentencias” que despenalizaron el aborto.
Con su sentencia C-355 del 2006, la Corte Constitucional despenalizó el aborto en Colombia bajo tres causales, y lo liberalizó hasta las 24 semanas de gestación con su fallo 055 del 2022. Luego de ese periodo, aún es posible abortar con las condiciones de la sentencia del 2006.