Los fieles de la Ciudad Eterna celebran a la Virgen del Carmen, venerada en Roma como la “Madonna dei Noantri” o la “Madonna Fiumarola”, durante cerca de 10 días con diferentes manifestaciones de piedad popular.
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Después de que el pasado sábado 20 de julio tuviera lugar la tradicional procesión por las calles del emblemático barrio de Trastevere, en la tarde domingo 28 cientos de romanos y turistas acudieron a orillas del río Tíber para acompañar a la barca que transportaba a la Virgen.
Este año, la solemne procesión contó con la participación del Secretario de Estado de la Santa Sede, el Cardenal Pietro Parolin, que hace unos días ha regresado de su viaje a Ucrania para transmitir la cercanía del Papa Francisco al país en guerra.
El origen de la “Madonna dei Noantri”
El culto a la Virgen del Carmen en Roma tiene su origen en 1535, cuando, según la historia, unos pescadores encontraron después de una fuerte tormenta una estatua de la Virgen María hecha de madera de cedro en la desembocadura del río y la donaron a los carmelitas que se encontraban en la iglesia de San Crisógono.
La #Fiumarola o "Madonna dei Noantri", una tradición histórica en el Trastevere romano. pic.twitter.com/RsCFTmAjnn
— Daniel Ibáñez (@dibanezgut) July 28, 2024
Más tarde, se trasladó primero a San Giovanni dei Genovesi y luego, en el siglo XX, a la iglesia de Sant'Agata, donde se guarda actualmente, convirtiéndose así en la Patrona de los habitantes de Trastevere, barrio romano cuyo significado es “detrás del río”.
La estatua mariana es transportada fuera de esta iglesia solamente una vez al año, el sábado siguiente a la fiesta de la Santísima Virgen del Carmen, 16 de julio, y regresa al templo después de una solemne procesión el domingo siguiente por el río Tíber.
Esta fiesta es una de las más antiguas de Roma y es muy esperada por sus habitantes durante todo el año, especialmente por los del barrio de Trastevere, quienes utilizan el término “Noantri” (el resto de nosotros) para recordar su pertenencia a Roma más allá del río Tíber.