El Papa Juan Pablo II expresó su pesar por la matanza de los 150 refugiados tutsi en un campo de la ONU en Burundi y resaltó la tarea humanitaria que realiza el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) por "la importante misión que desarrolla".
Según informó el boletín de la Santa Sede, el secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Angelo Sodano, en nombre del Pontífice, envió un telegrama de condolencias al Nuncio Apostólico en Burundi, Mons. Paul Gallagher, en el que expresó el dolor del Papa por la masacre de civiles en Gatumba, en la región de Bujumbura.