Un desconocido ingresó a la parroquia Nuestra Señora del Rosario, en Quilpué (Chile), durante la madrugada del martes 4 de junio, causando destrozos y profanando el Santísimo Sacramento.

En un comunicado a los fieles, desde la parroquia precisaron que los delincuentes “ocasionaron daños estructurales, provocaron destrozos en un vitral histórico y, lo más doloroso, profanaron el Santísimo Sacramento contenido en la Custodia que estaba en el Sagrario Lateral”.

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Hechos como este, denunciaron, “constituyen un atentado a la fe cristiana católica, además de que vulneran el Sacramento de la Eucaristía y el fervor y piedad de todo el pueblo de Dios”.

Ante lo sucedido, convocan a un acto de reparación de desagravio que consiste, en primer lugar, en 40 horas de adoración al Santísimo, comenzando el viernes 7 de junio y concluyendo el domingo 9 al mediodía.

Al finalizar la adoración eucarística, el domingo a las 12:00 horas (hora local) se celebrará en la parroquia una Misa de desagravio, presidida por el Obispo de Valparaíso, Mons. Jorge Patricio Vega Velasco. 

A la vez que invitan a toda la comunidad a rezar por los daños perpetrados al Santísimo Sacramento, la parroquia hizo un llamado a la oración, ayuno y penitencia como gesto de reparación.

Además, anunciaron que junto a sus asesores jurídicos se tomarán acciones legales, entregando todas las pruebas y evidencias a las autoridades.

“Esperamos que estos atentados a la fe no se vuelvan a repetir”, concluye el mensaje de la parroquia.

Firman el comunicado el párroco del lugar, P. Pedro Nahuelcura Vargas; y los vicarios parroquiales, P. Ramón Tapia Rodríguez y P. Carlos Suárez Corail.

Según se pudo ver a través de las cámaras de seguridad, un sujeto se trepó en el portón del templo, que se encontraba cerrado, y primero buscó abrir un vehículo que estaba estacionado allí. Sin éxito en el intento de robo del automóvil, trepó una pared, para luego ingresar a la parroquia, rompiendo un antiguo vitral que rinde homenaje a San Sebastián.

Además de llevarse 30.000 pesos chilenos del diezmo (poco más de 30 dólares), el ladrón sustrajo la custodia con el Santísimo Sacramento, y provocó daños en el Sagrario, al intentar abrirlo mediante la fuerza.

Agentes de Carabineros llegaron al lugar para realizar investigaciones y tomaron fotografías y huellas dactilares, para intentar dar con el autor del robo y profanación.