Un hombre cristiano que fue acusado de blasfemia y luego atacado brutalmente la semana pasada por una turba de musulmanes, en la provincia de Punjab (Pakistán), ha fallecido a causa de las graves heridas infligidas en su cuerpo.

Según Associated Press, Nazir Masih, de 72 años, falleció este lunes 3 de junio. A pesar de haber sido intervenido quirúrgicamente dos veces debido a múltiples golpes en la cabeza, no logró sobrevivir al ataque sufrido el 25 de mayo.

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El ataque también afectó a varias familias cristianas de la colonia Mujahid, quienes se vieron obligadas a huir del lugar. Cientos musulmanes fueron arrestados y procesados por la Policía en relación con el incidente y por intentos de linchamiento en contra de Masih.

Catholics in Pakistán, un medio liderado por el Arzobispo de Lahore, Mons. Sebastian Francis Shaw, informó que los ritos de exequias fueron celebrados por pastores cristianos locales, pero también hubo dos sacerdotes del área de Sargodha, representando el apoyo de la Iglesia Católica.

Según el agente de la policía del distrito Assad Ijaz Malhi, el hombre cristiano fue posteriormente enterrado en medio de fuertes medidas de seguridad. La presencia policial ha aumentado en los últimos días alrededor de las localidades cristianas e iglesias desde el ataque.

Sobre el incidente

El incidente tuvo lugar el 25 de mayo en Sargodha, después de que uno de los vecinos musulmanes de Masih lo acusara de cometer blasfemia por arrojar páginas del Corán a la carretera.

A medida que se difundían los rumores, alrededor de 2.000 personas de la misma localidad y algunas de aldeas cercanas se reunieron frente a la casa de Masih.

La multitud destruyó medidores eléctricos y unidades de aire acondicionado exteriores, y prendieron fuego a las casas y la tienda de zapatos de Masih. Finalmente, sacaron al cristiano a la calles, le lanzaron piedras y lo golpearon con palos.  

De acuerdo a cristianos locales, miembros de la organización extremista Lashkar-e-Labak Pakistan desempeñaron un papel clave en el ataque. Ese grupo estuvo involucrado en el ataque a viviendas e iglesias cristianas en Jaranwala en agosto de 2023.

Más del 96% de la población de Pakistán es musulmana. Los cristianos, que constituyen aproximadamente el 1,3% de la población, enfrentan persecución religiosa, lo que ha resultado en numerosas acusaciones falsas de blasfemia y sentencias de muerte o cadena perpetua.