La crisis vocacional comienza con el abandono de la oración, señaló Mons. Carlos Alberto Correa Martínez en su llamado a los sacerdotes de la Diócesis de Apartadó (Colombia) a mantener su relación con Dios a través del encuentro personal con Cristo y la gracia de los sacramentos.
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Cristo “es el origen, el centro y el sentido de nuestro sacerdocio”, afirmó Mons. Correa Martínez durante la Misa de toma de posesión como nuevo Obispo de Apartadó, celebrada el 11 de mayo en la Catedral Santa María la Antigua.
“El sacerdote debe ser un hombre de oración. El mundo con su ruido, con su activismo, pierde sentido de lo importante. Su actividad y sus capacidades son infructuosas si falla la oración, el encuentro personal con el Señor. Toda crisis vocacional comienza por el abandono o la tibieza de la oración”, advirtió.
Por ello, el nuevo Obispo de Apartadó alentó a los presbíteros a renovar la unción con la que fueron introducidos al sacerdocio, para así poder mostrar al pueblo de Dios que “sólo en Él hay lugar para la misericordia”.
“El mensaje de Jesús es de liberación total de las personas, así como de la sociedad y del ambiente en el que viven”, afirmó.
Sobre su nueva misión en Apartadó, lugar por donde transitan miles de migrantes en su camino a la selva del Darién, Mons. Correa Martínez llamó a la comunidad local a ser siempre garante de la dignidad humana, no sólo en el tema de la migración, sino también en la defensa de la vida y en el combate a la pobreza.
“Como Iglesia de Cristo resucitado anunciemos, promovamos y seamos garantes de la dignidad humana”, expresó.
“Apartadó, déjame ver tu rostro, tu maravilloso semblante de historia, de luz, de trabajo y entrega, no sólo para continuarlo, sino para entrar en profunda comunión contigo. El amor es comunión, déjame oír tu voz en la oración (…) Hasta conocerte, amarte y entregar la vida por encima de cualquier interés personal”, manifestó.
En su homilía, el nuevo obispo agradeció la acogida que le brindaron su predecesor, Mons. Hugo Alberto Torres Marín; y el P. Leonidas Moreno Gallego, quien se desempeñó como administrador diocesano de Apartadó desde el 28 de marzo de 2023.
La ceremonia de toma de posesión fue presidida por el Nuncio Apostólico en Colombia, Mons. Monseñor Paolo Rudelli. Luego, la Misa fue celebrada por el nuevo obispo y concelebrada por el representante vaticano, el Arzobispo de Santa Fe de Antioquia, Mons. Hugo Alberto Torres Marín; y el Arzobispo de Medellín, Mons. Ricardo Tobón Restrepo.
Estuvieron presentes 17 obispos colombianos, el Arzobispo de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa, miembros de la comunidad diocesana, familiares, autoridades civiles, fieles y una delegación del Vicariato Apostólico de Guapi, de la que Mons. Correa Martínez fue vicario durante diez años.