El Gobierno de España ha aprobado este martes en el Consejo de Ministros un plan de implementación de las recomendaciones planteadas en el informe sobre abusos sexuales en el seno de la Iglesia Católica sobre el que la Conferencia Episcopal Española (CEE) ha emitido un comunicado de rechazo en el que denuncia trato injusto y discriminación.
Antes de dar detalles del plan, el Ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha afirmado, extrapolando datos de una encuesta encargada por el Defensor del Pueblo, que en España habría unas 440.000 víctimas adultas de abusos sexuales lo que representaría un 1,13% de la población adulta en España.
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“En torno a la mitad de esos abusos podrían haber sido cometidos por religiosos de la Iglesia Católica”, ha asegurado Bolaños.
“Señalamiento público y discriminatorio por parte del Estado”
Para los obispos, “no se pueden plantear unas medidas de reparación que, siguiendo el informe del Defensor del Pueblo, dejarían fuera a 9 de cada diez víctimas”, por lo que “la Iglesia no puede aceptar un plan que discrimina a la mayoría de las víctimas de abusos sexuales”, subrayan.
Además, consideran que “el texto presentado parte de un juicio condenatorio de toda la Iglesia, realizado sin ningún tipo de garantía jurídica, un señalamiento público y discriminatorio por parte del Estado”.
En este sentido, insisten, “al centrarse sólo en la Iglesia católica, aborda únicamente una parte del problema. Es un análisis parcial y oculta un problema social de enormes dimensiones”.
Para la CEE, las modificaciones legales previstas en el plan del Gobierno “cuestiona el principio de igualdad y de universalidad que debe tener todo proceso que afecte a derechos fundamentales”.
Acto público sólo con víctimas de la Iglesia
El Plan, que tendrá vigencia hasta 2027, se vertebra en torno a cinco ejes: reconocer y reparar; atender a las víctimas; prevenir; formar y sensibilizar; e informar e investigar sobre el primer eje.
Además, el Ejecutivo ha anunciado que va a organizar un acto público con las víctimas de abusos sexuales cometidos en el seno de la Iglesia Católica que pretende ser “una reparación simbólica”, a lo que ha añadido que se establecerán mecanismos para una reparación material “que sea adecuada y que sea suficiente en términos económicos”.
Durante su comparecencia, el ministro ha asegurado que la idea del Ejecutivo “es hacerlo en colaboración, de la mano con la Iglesia Católica”. El pasado viernes, mantuvo una reunión con el recientemente elegido presidente de la CEE, Mons. Luis Argüello, Arzobispo de Valladolid.
En ese encuentro, según señala el comunicado de los obispos españoles, “la CEE ya adelantó al ministro Bolaños su valoración crítica sobre este plan al fijarse solo en la Iglesia Católica”, si bien, le manifestó su disposición a colaborar “en los ámbitos de su responsabilidad y competencia, pero siempre en la medida en que aborde el problema en su conjunto”.
Por su parte, el Arzobispo de Valladolid y presidente de la CEE, Mons. Luis Argüello, expresó a través de la red social X: "La Iglesia no quiere que el Estado asuma su responsabilidad económica, moral y espiritual con las víctimas de abusos ni que el Gobierno regule lo que no le corresponde. Ha de regular para todos desde el respeto al principio de legalidad y de universalidad. Ahí nos encontraremos".
La Iglesia no quiere que el Estado asuma su responsabilidad económica, moral y espiritual con las víctimas de abusos ni que el Gobierno regule lo que no le corresponde. Ha de regular para todos desde el respeto al principio de legalidad y de universalidad. Ahí nos encontraremos.
— Mons. Luis Argüello (@MonsArguello) April 23, 2024
Actualizado el 24 de abril de 2024 a las 10:56 GMT + 2.