El Cardenal Louis Raphael Sako, Arzobispo de Bagdad y Patriarca de Babilonia de los Caldeos, ha regresado a Bagdad, la capital de Irak, después de estar ausente de su sede patriarcal desde julio de 2023. El purpurado había decidido retirarse de la ciudad y quedarse en el monasterio patriarcal sacerdotal en la región del Kurdistán después de una decisión del gobierno que afectaba a la Iglesia Católica.
La visita del Cardenal Sako a Bagdad del 10 al 13 de abril se produjo "por invitación personal del primer ministro iraquí", Mohammed Shia' Al Sudani, según el sitio web oficial del Patriarcado caldeo.
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Al Sudani encargó a un representante que diera la bienvenida a Sako en el Salón de Honores del Aeropuerto Internacional de Bagdad.
Junto con Mons. Thomas Mirm, el Patriarca se dirigió al Palacio Patriarcal, donde Mons. Shlimon Warduni y Mons. Basilios Yaldo le dieron la bienvenida, acompañados por sacerdotes de la Arquidiócesis de Bagdad.
El jueves por la mañana, Al Sudani se reunió con el Cardenal Sako y su delegación para discutir la situación general de Irak, especialmente los asuntos relacionados con la "estabilidad en el país", según el sitio web del primer ministro.
Al Sudani dijo que acogía con beneplácito el resurgimiento de la presencia y el papel influyente del Patriarca en Bagdad. Afirmó el compromiso de su gobierno de fomentar la coexistencia, la fraternidad y la verdadera ciudadanía en todos los segmentos de la sociedad iraquí. El primer ministro de Irak también subrayó la fortaleza de la nación en la diversidad, destacando las contribuciones históricas de los cristianos iraquíes a la construcción y el fortalecimiento del estado.
En sus propias declaraciones, el Cardenal Sako destacó la importancia de que el gobierno tome mayores medidas para cumplir con sus deberes hacia el pueblo iraquí. Hizo hincapié en la necesidad de mejorar la vida de los ciudadanos y satisfacer todas sus demandas y necesidades, así como de hacer un seguimiento de las cuestiones relativas a las minorías y garantizar sus derechos.
El Patriarcado caldeo invitó a los fieles a participar en una Divina Liturgia presidida por el Patriarca el 12 de abril en la catedral de San José de Bagdad. La Misa se celebró para dar gracias a Dios, "que nos ha concedido alivio después de las dificultades y ha alegrado nuestros corazones con el regreso de nuestro pastor y cabeza de nuestra Iglesia".
Khaled Jamal Albert, director general de asuntos cristianos del Ministerio de Dotaciones y Asuntos Religiosos de la región del Kurdistán, comentó a Rudaw Media Network que la reubicación del Cardenal Sako, ya sea de forma permanente a Bagdad o trasladando su sede a Erbil, sería preferible a su continua ausencia de la sede patriarcal.
Los acontecimientos que llevaron a la salida del Cardenal Sako se desencadenaron en julio de 2023, cuando el presidente de Irak, Abdul Latif Rashid, retiró el decreto que nombraba al clérigo Patriarca de la Iglesia caldea en todo el mundo, revocando también el control de las dotaciones eclesiásticas. Durante ese tiempo, el patriarcado describió la decisión como "sin precedentes en la historia iraquí".
El Cardenal Sako había afirmado previamente durante una conferencia de prensa que celebró en el Palacio Patriarcal de Bagdad en julio del año pasado que la Iglesia no interfiere en la vida política. Describió como sospechoso el silencio del gobierno iraquí sobre algunos de los abusos y ataques injustificados contra los cristianos. Señaló que el patriarcado se vería obligado a emprender las acciones legales apropiadas y a recurrir a los foros internacionales si persistía el silencio.
Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en ACI Mena.