La Hermandad San Antonio de Padua, una nueva organización de laicos nacida en la iglesia San Francisco de Asís de Bogotá, ha aprovechado la celebración de la Semana Santa 2024 para poner en práctica su propuesta de retomar las procesiones de tipo tradicional en el centro de la capital colombiana.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
David Pérez, miembro de esta hermandad y uno de sus propulsores, explicó a ACI Prensa que si bien durante la Semana Mayor se realizan diferentes procesiones, “en ocasiones no presentan la solemnidad que por tradición estas requieren”.
“Además, cada vez son menos a nivel distrital, y las iglesias del centro, por ser las más antiguas y bellas, merecen tener procesiones de tipo tradicional donde se enaltece el sentimiento católico del pueblo católico”, que en su mayoría proviene de los sectores populares.
En ese sentido, los miembros de la hermandad apuntan a que estas se retomen en las calles del centro durante todo el año, y además sean un medio evangelizador ante el entorno cada vez más secularizado y ajeno a la práctica religiosa.
“Uno de los postulados más importantes del liberalismo es la secularización de la sociedad, que la fe sea muy privada, y eso es contrario al Evangelio. Entonces, nosotros decidimos retomar todo esto (las procesiones), sobre todo en el centro”, indicó.
Y es que la iglesia San Francisco de Asís, levantada a mediados del siglo XVI, se ubica en la Calle Real —conocida como Carrera Séptima—, una de las más concurridas y por tanto abarrotada de comercios y vendedores ambulantes, algunos de los cuales publicitan sus productos con altoparlantes y música que por instantes pueden oírse dentro del templo durante las celebraciones litúrgicas.
Como parte de la iniciativa, los miembros de la Hermandad San Antonio de Padua portan las imágenes sagradas vestidas con túnicas y capirotes, al estilo de los tradicionales nazarenos, tal como sucede también en la ciudad colombiana de Tunja y otras de España.
“Decidimos vestirnos así para revivir las tradiciones que se han perdido con el pasar del tiempo a causa del modernismo y la secularización”, explicó David Pérez.
Así, los diez miembros de la hermandad, acompañados de sacerdotes, religiosos y fieles, salieron a las calles la tarde del Sábado Santo llevando en hombros la imagen de la Virgen de los Dolores.
Al día siguiente sería el turno de la procesión de Jesucristo Resucitado, cuya anda fue recibida con reverencia fuera de la iglesia por una del apóstol San Juan, ante las miradas de las personas que caminaban por esta zona del centro.
Ambas procesiones recorrieron no sólo calles céntricas, sino también los alrededores de lugares característicos como el Templete del Libertador, llamando la atención de los transeúntes, algunos de los cuales se unían por tramos. Incluso uno se animó a portar el anda del Cristo Resucitado.
Así, ya de retorno, el sábado y el domingo las imágenes recorrieron nuevamente la Calle Real pasando al lado de los puestos informales de venta de artículos y comidas. Uno de los vendedores, al ver la llegada de la procesión, decidió suspender la música para animar a las personas a recibir la imagen sagrada con respeto.
¿Cuál es el balance de esta primera experiencia? David Pérez ha afirmado que ha sido bueno y que además ha alentado a los frailes franciscanos a hacer algo más grande para los siguientes meses.
Si desea formar parte de la Hermandad San Antonio de Padua, puede comunicarse al número 3006941679 o enviar un mensaje a su cuenta de Instagram.