La Custodia de Tierra Santa (CTS) dio a conocer que unos óleos especiales fueron bendecidos en el lugar donde Jesús visitaba a sus amigos Lázaro, Martha y María. Estos ungüentos serán usados en un rito muy emotivo el Viernes Santo en el Santo Sepulcro.
La Semana Santa en Jerusalén está llena de celebraciones muy particulares. Una de ellas es la del Lunes Santo. En este día, el Evangelio narra que María, hermana de Lázaro, ungió los pies de Jesús con un perfume de nardo carísimo y que los secó con sus cabellos.
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En este contexto, el P. Francesco Patton, Custodio de Tierra Santa, fue en peregrinación con los franciscanos hasta la Iglesia de San Lázaro, en Betania, donde se cree que vivían los 3 amigos de Jesús. Por eso a esta iglesia también se le llama Santuario de la Amistad.
El Custodio presidió allí una Misa solemne en la que destacó que “el perfume con el que María unge los pies de Jesús es una profecía de que la vida y el amor son más fuertes que la muerte. Es profecía de resurrección”.
Luego señaló que el día que resucitemos “ya no sentiremos el mal olor del odio, de la venganza, de la enemistad y de la muerte, sino sólo el aroma de la resurrección, de la vida en Dios y del amor consumado en la vida en Dios”.
Posteriormente, el sacerdote franciscano bendijo los óleos perfumados, de aromas y nardo, que estaban en dos ánforas de alabastro. Al término de la Eucaristía, ungió con unas gotas las manos de los fieles que participaron.
¿Para qué sirven estos óleos en Tierra Santa?
En un video publicado el 2022 por el Christian Media Center (CMC), área de comunicaciones de la CTS, el P. Patton precisó que los óleos son usados en el funeral de Cristo, que se realiza en el Santo Sepulcro cada Viernes Santo.
Asimismo, describió que también se utilizan en otras ocasiones, como en Pentecostés, para ungir las manos de los fieles.
En el video y mientras el Custodio explicaba estos detalles, el CMC reproduce unas tomas en las que se ve al P. Patton ante el Cristo yacente, esparciendo un ungüento sobre esta imagen.
En otro momento se ve al Custodio con una capa pluvial negra y delante de él a dos diáconos con dalmáticas negras llevando cada uno una vasija especial para portar el óleo.
La CTS resalta que estos ungüentos recuerdan también el pasaje bíblico en el que José de Arimatea y Nicodemo rindieron honores al cadáver del Señor cuando fue ungido. Además, recuerdan el momento “cuando tres mujeres llevan aceites y aromas a la tumba (ahora vacía)”.
No se deben confundir con los santos óleos
Es preciso indicar que la bendición de estos óleos no tiene que ver con la bendición de los santos óleos y el santo crisma, algo que generalmente hacen los obispos de todo el mundo en la Misa Crismal del Jueves Santo.
Los óleos que se bendicen en la Misa Crismal son los que se usan habitualmente para administrar los sacramentos como la Confirmación y la Unción de los Enfermos.