El P. Juan María Solana, L.C., director del Centro Magdala en Tierra Santa, ofrece cuatro consejos para vivir una auténtica Semana Santa en este 2024.
1. La Semana Santa es una oportunidad para recibir la gracia
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En declaraciones a ACI Prensa, el sacerdote de origen mexicano señaló: “el primer consejo que puedo darles es pensar en que tenemos una oportunidad, una oportunidad para aprovechar una gracia, como decía San Agustín, una gracia que pasa y no vuelve”.
El presbítero resaltó la importancia de tener en mente en estos días que “Jesús está yendo a sufrir a Jerusalén, a morir, a dar su vida por nosotros”.
2. Rezar mucho en Semana Santa
Tras comentar que cuando era niño su familia solía ir de vacaciones en Semana Santa, el P. Solana aconsejó orar mucho en estos días, yendo a la Misa del Jueves Santo donde se instituyó el Orden Sacerdotal y la Eucaristía.
Y también tener una especial conciencia el Viernes Santo, a las 3:00 p.m., la hora de la muerte del Señor, para rezar, por ejemplo 3 Ave María y 3 Padrenuestros con algunas jaculatorias, agradeciendo a Jesús, que en ese momento “está dando su vida por nosotros en la cruz”.
“Estemos donde estemos, no perdamos de vista a Jesús que va a Jerusalén y va a ofrecer su vida por amor nuestro. Él es nuestra salvación. Él es nuestra esperanza. Él es nuestra Pascua”, agregó.
3. Acompañar a Jesús “en Tierra Santa”
El sacerdote legionario indicó a ACI Prensa que “la Semana Santa es una pequeña peregrinación a Tierra Santa, es decir que es acompañar a Jesús más o menos en un orden cronológico y geográfico en lo que es su pasión, la entrada de Jesús a Jerusalén el Domingo de Ramos, los primeros días de la semana, en esa tristeza, en esa angustia donde vive con sus amigos Lázaro, Marta y María, y finalmente se desencadena la pasión”.
Después la Última Cena y “la oración y agonía en Getsemaní: Jesús sufre, es llevado al sanedrín. En la mañana es llevado ante Poncio Pilatos. Sufre 2 juicios, uno religioso y uno civil. Y finalmente lo condenan y muere en la cruz”. En todo este recorrido se puede acompañar espiritualmente al Señor.
4. Acompañar a la Virgen María en el gran silencio
El Sábado Santo, continuó el presbítero mexicano, se debe “acompañar mucho a la Virgen. Estar cerquita de la Virgen María porque ella es nuestra esperanza”.
“Ella estuvo fiel a los pies de la cruz, sufriendo lo indecible, entonces, acompañemos a la Virgen María en ese silencio, ese gran silencio del que nos hablan algunos padres de la Iglesia”, alentó.
Para concluir, el sacerdote subrayó: “Y el domingo resucitar con Jesús: Resucitó Cristo, nuestra esperanza. Cristo, nuestra paz, Cristo nuestra luz, el que nos da la vida. Una vida que ya no va a morir más”.