Más de 700 personas acudirán como misioneros esta Semana Santa en España para ayudar a celebrar los misterios de la Pasión a parroquias necesitadas a través del apostolado Juventud y Familia Misionera del Regnum Christi.
Los 741 misioneros (160 de ellos, jóvenes) acudirán, desde el Miércoles Santo al Domingo de Resurrección, a 18 localidades distribuidas en 10 provincias españolas, algunas de ellas en la denominada “España vaciada” donde hay párrocos que atienden 25 pueblos.
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En concreto, las 134 familias se harán presentes en las provincias de Albacete, Ávila, Cáceres, Cantabria, Córdoba, Guadalajara, León, Madrid, Murcia y Valencia, donde apoyarán en lo que necesiten a los párrocos, que durante estas fechas han de sumar a sus habituales tareas pastorales, la celebración de los actos litúrgicos propios de la Semana Santa.
Miguel y María José forman un matrimonio que acude cada año a esta llamada y este año se encuentran especialmente motivados, al hacerse cargo de la creación de un nuevo equipo misionero dirigido a matrimonios jóvenes con niños pequeños.
“Los niños viven las misiones como un juego y, al final, normalizan lo que es evangelizar al estar hablando de Dios y de la Virgen como algo normal. Los niños no tienen problema en parar a las personas por la calle e invitarles a los oficios. Normalizan algo que no es tan normal”, explica María José, en declaraciones recogidas por el Regnum Christi.
Uno de los párrocos que va a contar con esta ayuda, es el P. Jorge González Guadix, al cargo de tres pequeños de la Sierra de Norte Madrid: Braojos, Piñuécar y La Serna del Monte.
Esta Semana Santa contará con la ayuda de seis familias, tres seminaristas y un sacerdote de los Legionarios de Cristo y, según detalla la Archidiócesis de Madrid, el párroco reconoce que “gracias a ellos celebramos la Semana Santa con dignidad”.
El P. Miguel David Pozo León, responsable de las parroquias de Santa Luisa de Marillac y San Martín de Porres, explica en el sitio web del Regnum Christi que “El impacto de un joven siempre es como el arcoíris que te sorprende después de un día frío y te llena corazón de esperanza y de paz”.
Durante esta Semana Santa, espera que los jçovenes misioneros se involucren en dos proyectos destinados a ayudar a niños en situación de desventaja social y a acoger a jóvenes de la calle para ayudarles a “recomponer su vida y llegar a su meta”, asegura el párroco.
Al mismo tiempo, los jóvenes misioneros voluntarios reciben una gran enseñanza: “La experiencia vivida marca al joven. Crea en él un impacto tan importante que puede llegar a resituar los criterios, las expectativas y la forma de ver las cosas”, resume el P. Pozo.
Juventud Misionera comenzó su andadura en España en 1994, y Familia Misionera en junio de 2001. En las misiones, junto a los laicos, colaboran legionarios de Cristo y consagradas y laicos consagrados del Regnum Christi.