Zezé Luz, fundadora y presidenta ejecutiva de la Red Nacional en Defensa de la Vida y la Familia – Red Colaborativa Brasil, resaltó el importante papel de la maternidad en la vida de las mujeres.
Para Zezé, el Día Internacional de la Mujer, celebrado el 8 de marzo, es "el día en que cada mujer se mira a sí misma" y "reconoce el privilegio de la dignidad de ser hija de Dios, pero sobre todo, del gran privilegio, del gran don que es poder generar una nueva vida".
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“Cuando una mujer descubre este bien mayor que es el ejercicio de la maternidad, tiende a ser mucho más feliz, porque descubre en sí misma una fuerza extraordinaria que antes imaginaba que no tenía".
"La Palabra de Dios nos dice que una mujer se salvará por la maternidad (1 Timoteo 2,15)", asegura María José da Silva, conocida como Zezé Luz. Es madre de dos hijas y activista provida desde 2004. La red que fundó, con sede en Río de Janeiro (Brasil), asegura haber salvado a más de 2.000 bebés del aborto al ayudar a mujeres embarazadas en situaciones difíciles.
La propia Zezé Luz tuvo "experiencias traumáticas" debido al aborto que tuvo de un niño concebido a causa de una violación.
Cuando se enteró de que estaba embarazada por segunda vez, Zeze dice que sintió que "Dios no la había condenado" y que le estaba "dando la posibilidad de redimirse".
"La maternidad realmente me ha salvado la vida", dijo. "Le digo a mi hija que me salvó la vida porque estaba muy perdida y Dios me dio este regalo".
"La mirada de mi hija, la sonrisa de mi hija, el abrazo de mi hija me curaron", dijo Zezé. "Estaban curando mis dolencias visibles y esas invisibles que sentimos, que sufrimos, pero que nos levantamos con cada sonrisa, cada ‘te amo’ de mi hija".
"Entonces, cuando escuchamos a las mujeres hablar de mis derechos, de mi cuerpo, de mis reglas, de mis derechos sexuales y reproductivos, cuando tratan de aislar o ignorar la existencia de otro ser humano allí, creo que las mujeres se vuelven menos virtuosas", señaló. "Negar la existencia y la dignidad de este otro ser humano. Esta es realmente la razón de la tristeza y el empobrecimiento de la mujer misma, la que fue engendrada, la que tuvo el privilegio de nacer".
Zezé define su trabajo provida como "un apostolado".
El 7 de marzo Zezé atendió a una mujer embarazada que fue abandonada por el padre de su bebé. "Ella lloraba, me miraba y yo la miré a ella, puse mi mano así sobre su mano y le dije: sé exactamente lo que es esto, sé lo que estás sufriendo", recuerda Zezé, quien también fue madre soltera. "Entonces, ponerse en sus zapatos y haber vivido esta experiencia", indica Zezé, le permite "extender sus manos y ayudar a estas mujeres a ver que ese momento es fugaz, que el dolor es fugaz, que en poco tiempo nacerá el bebé, el sufrimiento, los sentimientos de abandono, de pérdida, serán resignificados con una sonrisa, un abrazo de este niño que mirará y dirá: ¡Muchas gracias, mamá! Le dijiste que sí a mi vida a pesar de todo".
Para la presidenta de la Red Colaborativa Brasil, las activistas que defienden "el derecho de las mujeres a matar a sus propios hijos están disminuyendo sus derechos". "No hay empoderamiento cuando se anula la posteridad de los hijos que son engendrados por estas mujeres".
Las feministas, lamentó, ponen "a las mujeres en el papel de vulnerabilidad, ofreciéndoles la falsa solución del aborto y la esterilización". "Hacen que esa mujer tenga aversión a vivir su feminidad y, en consecuencia, la maternidad".
"Todo el futuro de la humanidad pasa por el vientre de una mujer", enfatizó Zezé.
Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en ACI Digital.