Un grupo de jóvenes de diversas comunidades y carismas, así como los miembros de la Pastoral Juvenil de la Arquidiócesis de La Habana, en Cuba, se congregaron para llevar a cabo la celebración de la primera Misa y el primer Vía Crucis del tiempo de Cuaresma.
La Eucaristía, celebrada el viernes 16 de febrero en la parroquia de San Juan de Letrán, ubicada en el barrio de El Vedado, fue presidida por el párroco, el P. Raisel Pomares, fraile de la Orden de Predicadores, y concelebrada por los presbíteros asesores de la Pastoral Juvenil local, P. Dyan Rivero y P. Junior Antonio Delgado.
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Entre los jóvenes laicos católicos presentes, EWTN Noticias tuvo la oportunidad de conversar con Miguel Suárez y Luzmari Rodríguez, quienes aseguran que esta temporada litúrgica adquiere un significado más profundo cuando se unen en oración y participan de las devociones tradicionales como el camino de la Cruz.
“Venir a compartir la fe, venir a caminar juntos, venir a caminar con Jesús y qué bonito hacerlo con el ejercicio del Vía Crucis que nos prepara”, comentó Suárez al programa EWTN Noticias.
Rodríguez, por su parte, señaló que “el hecho de estar todos juntos” los “ayuda a mantener viva” la esperanza y a prepararlos “para vivir la Pascua con mayor intensidad, a llevar esa alegría y transmitirla a los otros jóvenes que no pudieron venir y motivarlos a unirse, a que sientan la alegría a pesar de todas las dificultades que podamos vivir”.
Al igual que Miguel y Luzmari, otra joven católica de nombre Mari Heidi siente que este tiempo de compartir con personas de su edad en la iglesia es también un camino de exploración interior.
“Ha sido para mí una manera de profundizar también en mi relación con Dios y con los jóvenes, cómo irnos preparando hacia la Cuaresma, hacia ese camino de humildad al que nos lleva en la imposición de la ceniza, la oración y la contemplación del Dios vivo que muere por nosotros y nos salva”, compartió a EWTN Noticias.
A pesar de la crisis económica y social en la isla, los jóvenes cubanos aseguran estar entusiasmados por los encuentros organizados por la Pastoral Juvenil de La Habana, los cuales son convocados mensualmente en diferentes iglesias de la capital.
“Cada mes solemos visitar una comunidad distinta y unirnos a los grupos juveniles de esas parroquias, experimentando el llamado del Señor a dejarnos conducir por Dios en el camino de la libertad”, contó el P. Junior Delgado, asesor de la Pastoral Juvenil de La Habana.
Para esta ocasión, los miembros de la Pastoral compartieron meditaciones en cada estación del Vía Crucis y para los que no pudieron participar de la celebración del Miércoles de Ceniza, se le impartió la ceniza en sus frentes.
En marzo los jóvenes volverán a reunirse para una jornada de servicio y voluntariado en el Hogar de Ancianos de la Iglesia de Santo Venia, en La Habana. Luego tendrán un momento de retiro y participarán de la Santa Misa.