Por Julieta Villar
La justicia de Estados Unidos condenó a casi 22 años de prisión a un ex sacerdote oriundo de Chile, por el delito de abuso sexual a un menor en el país norteamericano.
Se trata de Jaime Adolfo González Farías, de 69 años, condenado por la jueza federal a cargo de la causa, Mary Grieger, a 21 años y 10 meses de prisión, y vigilancia de por vida en el caso de ser liberado, de acuerdo al diario San Diego Union-Tribune.
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El ex sacerdote se declaró culpable de haber transportado a un menor con la intención de participar en actividades sexuales delictivas.
Ordenado sacerdote en Chile, González Farías desempeñó su ministerio durante 30 años. Llegó a Estados Unidos por primera vez en 2001, ejerciendo en los estados de Nueva Jersey y Florida. Luego retornó a su país de origen, pero volvió a Norteamérica en 2015.
Cinco años más tarde fue destinado a servir en la Diócesis de Charleston, en el estado de Carolina del Sur. Según la investigación judicial, allí conoció a la familia del niño de 11 años, que sería su víctima.
González Farías estableció un vínculo de amistad con el niño y su familia, dándoles regalos y otros artículos. En noviembre de 2020, el entonces sacerdote llevó al pequeño de vacaciones a la playa en Florida, donde lo intentó agredir sexualmente.
Según testimonios de agentes del FBI, el clérigo también se comportó de forma inapropiada y le mostró pornografía.
En agosto de 2023, el ex sacerdote se declaró culpable de haber transportado a un menor con la intención de participar en actividades sexuales delictivas, por lo que su abogado pidió reducir la sentencia a 10 años, argumentando que la declaración impidió que el niño y su familia tuvieran que revivir lo sucedido para testificar.
El material de la defensa de González Farías incluía 25 notas de apoyo firmadas por personas de las comunidades parroquiales donde se desempeñó durante sus años en Estados Unidos. Muchos de ellos se mostraron incapaces de creer que podría abusar de un niño.
Soy periodista, licenciada en comunicación por la Universidad Nacional de La Matanza en Argentina. Tengo experiencia laboral en organizaciones no gubernamentales. Desde 2016 me dedico al periodismo católico, primero en la Agencia Informativa Católica Argentina (AICA) y, desde 2022, como corresponsal de ACI Prensa para Argentina, Chile, Uruguay y Bolivia.
