El próximo domingo 11 de febrero el Papa Francisco elevará a los altares a la que se convertirá en la primera santa mujer de Argentina, Mama Antula, laica consagrada considerada por muchos como “la madre de la patria”.
En esta relevante ceremonia, que tendrá lugar en la Basílica de San Pedro, participarán representantes de la Iglesia Católica en Argentina y también líderes políticos, entre los que destaca Javier Milei, presidente del país de origen de la futura santa y también del Pontífice.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
En el marco de esta esperada canonización, han viajado hasta Roma el Arzobispo de Buenos Aires, Mons. Jorge Ignacio García Cuerva; Mons. Alberto Germán Bochatey, Obispo Auxiliar de la Plata; y Mons.Vicente Bokalic, Obispo de Santiago del Estero.
Los prelados, junto a Silvia Correale, postuladora de la causa de la futura santa, han ofrecido este jueves 8 de febrero un encuentro con periodistas en la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
Arzobispo de Buenos Aires: Una laica santa y alegre capaz de unir a nobles y esclavos
María Antonia de Paz y Figueroa —Mama Antula— fue una mujer de la provincia argentina de Santiago del Estero, laica consagrada, reconocida por dedicar su vida al anuncio del Evangelio, en especial entre los más pobres.
Fundó la Santa Casa de Ejercicios Espirituales en Buenos Aires, y desde allí difundió la espiritualidad jesuita, manteniendo vivo el legado ignaciano.
Desde Roma, Mons. Jorge Ignacio García Cuerva, Arzobispo de Buenos Aires, expresó su alegría por este “hecho importantísimo, que es tener nuestra propia santa”, al tiempo que resaltó el “desafío” que supone seguir su ejemplo en la actualidad.
En conversación con ACI Prensa, el Arzobispo de la capital argentina también destacó la “audacia y creatividad apostólica” de Mama Antula, quien en el siglo XVIII, “cuando habían sido expulsados los jesuitas del Virreinato del Río de la Plata por decisión del Rey Carlos III, ella se animó a tomar esta experiencia importante propuesta por San Ignacio de los Ejercicios Espirituales y seguirlos difundiendo por Argentina”.
“Se animó a hacer más, y eso me parece que es una característica de la santidad del mundo de hoy, animarnos a más, animarnos a vivir el Evangelio a fondo en la sociedad de hoy”, resaltó.
Además, recordó que Mama Antula no hacía diferencias e incluía a personas de todas las clases sociales. “En los Ejercicios Espirituales participaban familiares del Virrey, miembros de la aristocracia porteña, familias sencillas y esclavos, que permanecían juntas durante 10 días”.
Tomando esta actitud como ejemplo, el prelado invitó a “vivir la fraternidad y concretar el Magisterio del Papa Francisco”, especialmente en un mundo “donde solo buscamos aquello que nos divide”.
También resaltó “la alegría y el buen humor” de Mama Antula, quien tuvo una gran devoción por San Felipe Neri, el conocido como “santo de la alegría”.
Por último, aclaró que a pesar de que en muchas de sus imágenes es representada con un hábito que puede parecer el de una religiosa, “ella era una mujer laica”.
Por ello, Mons. García Cuerva aseguró que “todos somos iglesia, fundamentalmente los laicos, quienes tienen que tener mayor protagonismo y ser más escuchados”.
Respecto a una posible visita del Papa Francisco a Argentina, el Arzobispo de Buenos Aires aseguró que “hay un enorme deseo de que el Papa se encuentre con su pueblo. Le esperamos con el corazón y los brazos abiertos”, aseguró.
Postuladora de la causa: Mama Antula tenía una fe caminante y misericordiosa
Silvia Correale, postuladora de la causa de Mama Antula, definió a la futura santa como “la madre de la patria”, y subrayó que, a día de hoy, continúa siendo “un modelo de vida muy importante”.
En declaraciones a ACI Prensa, Correale describió su encargo de postuladora como “un servicio a la evangelización” y remarcó que “los santos son como el Evangelio encarnado en cada momento histórico determinado, ya que Dios obra y se manifiesta a través de ellos”.
Resaltó que “el Señor se manifestó a través de una mujer”, una laica consagrada que “tenía una fe impresionante y confiaba totalmente en la providencia. Era una persona muy confiada en la acción de Dios, muy humilde, austera y orante”.
“Casi la totalidad de lo que hizo lo hizo de la nada, con una austeridad total. Tenía una fe impresionante, muy fuerte y una gran caridad, era una persona que realizaba muchas obras de misericordia”, señaló.
Además, describió a la que será la primera santa argentina como “una mujer en salida, con una fe caminante y misericordiosa que ejercía además el ministerio de la escucha, ya que ella no predicaba en los Ejercicios, sino que lo hacían los sacerdotes”.
Más tarde, explicó que en la Santa Casa de Ejercicios Espirituales “se aceptaban a mujeres que salían de prisión para hacer un camino espiritual y poder insertarse en la sociedad. También trabajaban con las niñas, donde les enseñaban catequesis, a bordar, leer… hizo una gran obra social y educativa”.
Este lugar, resaltó, “era el centro de espiritualidad y valores morales de Buenos Aires. También, cuando una familia tenía un problema, acudía a ella, hay anécdotas muy hermosas de aquello”, aseguró.
Por último, afirmó que con esta canonización el Papa Francisco demuestra que “la presencia de una mujer en una sociedad y en la Iglesia puede dejar el sello por muchas generaciones y puede hacer mucho bien, respondiendo con generosidad el llamado del señor”.
“Todos tenemos una misión en la vida, nuestro carisma personal, Dios nos llama a la vida para una misión, tenemos que descubrirla y tener el coraje para seguirlo y dejar una huella, como hizo Mama Antula”.
Obispo de Santiago del Estero, ciudad de la futura santa: Su canonización es un regalo y un don de Dios
Por su parte, Mons. Vicente Bokalic, Obispo de Santiago del Estero, ciudad en la que nació María Antonia de San José, indicó a ACI Prensa que la próxima canonización “es un regalo y un don de Dios, quien encontró en esta mujer la colaboración para hacer una obra monumental”.
“Es además —continuó— un incentivo y un desafío para retomar lo que hizo. Ella peregrinó por toda la patria, descalza, caminando de pueblo en pueblo, invitando a gente de todas las clases sociales a los Ejercicios Espirituales, por donde pasaron cerca de ochenta mil personas”.
Puntualizó además que la vida de Mama Antula “es un regalo del amor de Dios capaz de transformar sociedades” y recordó que “ella estuvo veintidós años acompañando a los padres jesuitas”.