El Cardenal José Luis Lacunza, Obispo de David (Panamá) se ha disculpado al término de la Misa dominical celebrada en la Catedral de San José este 4 de febrero de 2024, después de ser encontrado sano y salvo tras permanecer en paradero desconocido durante dos días.
El Purpurado, desde el ambón, se dirigió a los presentes en los siguientes términos: “Quiero ofrecerles mi disculpa y pedirles perdón por el disgusto que les causé los días pasados. Sé que pasaron un mal rato. Algunas, derramaron abundantes lágrimas. No las merezco, se lo digo sinceramente, pero las agradezco. Y agradezco sobre todo sus oraciones”.
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Sin ofrecer detalles de lo sucedido durante el tiempo en que fue denunciada su desaparición, afirmó: “Fue una trastada estúpida. Que no las hice cuando tenía 15 años y la he hecho ahora cuando voy a cumplir 80. ¡Qué barbaridad! Cuando más viejo, más pendejo”.
La palabra trastada hace referencia a una travesura, una "mala acción de poca trascendencia", según el Diccionario de la Real Academia Española.
“Les doy las gracias por todo el cariño y toda la oración que han dedicado. Les pido mil perdones y les agradezco de corazón toda su preocupación”, concluyó el Cardenal.
El Caso Cardenal Lacunza
El Cardenal José Luis Lacunza, originario de Pamplona (España), desapareció el pasado 30 de enero, martes, y fue hallado sano y salvo el pasado jueves 1 de febrero. La Diócesis de David denunció su desaparición a la Policía, por lo que se inició una investigación por parte de la Fiscalía.
Un comunicado diocesano publicado el día de su aparición expresaba el agradecimiento por el esfuerzo de las autoridades y se informaba de que el Purpurado iba a ser sometido a una revisión médica.
Según detalló el P. Josué Pilides a ACI Prensa, el Cardenal salió el martes por la tarde en una camioneta de manera “totalmente inusual” pues el cardenal es “un hombre de costumbres, de una rutina bastante común”.
Miembro de la Orden de los Agustinos Recoletos, el Cardenal Lacunza realizó sus votos solemnes en 1967 en Pamplona y fue ordenado sacerdote dos años más tarde. Tras desempeñarse como profesor en Madrid, fue destinado a Panamá, donde fue nombrado Obispo Auxiliar de la Archidiócesis del mismo nombre en 1985 por San Juan Pablo II.
En 1994 fue destinado a la Diócesis de Chitré y cinco años más tarde, a la Diócesis de David. Tras desempeñarse como presidente de la Conferencia Episcopal de Panamá en dos ocasiones, fue creado cardenal el 14 de febrero de 2015 por el Papa Francisco.