La única víctima del ataque del domingo 28 de enero contra una iglesia católica en Estambul (Turquía) era un musulmán con discapacidad que solía ir a Misa, según señalan sus familiares.
Tuncer Murat Cihan, turco de 52 años, murió cuando dos hombres armados abrieron fuego en la iglesia de Santa María, en el distrito de Sariyer de Estambul, durante la Misa del pasado domingo.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Cihan era un musulmán aleví con discapacidad mental que durante dos meses había estado yendo a Misa los domingos, antes de morir en el atentado terrorista, según declararon dos de sus familiares a los medios de comunicación locales.
“Venía a la iglesia conmigo”, declaró Kazım Aydemir, tío de la víctima, al medio Gazete Duvar. “Era muy querido por la congregación. Lo mataron en vano. Estamos muy tristes”, agregó.
Çağın Cihan, sobrino del fallecido, declaró al mismo medio: “Era mi tío. Era una persona sencilla e inocente y, sin duda, una víctima inocente. Estaba jubilado y tenía una ligera discapacidad mental”. “Llevaba dos meses yendo a la iglesia los domingos”, añadió.
El funeral de Tuncer Murat Cihan se realizó el lunes 29 de enero en un cemeví, un lugar de culto aleví. Los alevíes son la minoría religiosa más numerosa de Turquía. Son una secta del islam chiíta que tienen prácticas folclóricas anatolias únicas y no realizan la ablución antes de las oraciones ni ayunan durante el Ramadán.
Según el gobierno turco, el 99% de la población del país es musulmana, incluidos los alevíes. En Turquía viven unos 25 mil católicos, entre ellos migrantes de África y Filipinas, según un informe de 2022 del Departamento de Estado de Estados Unidos.
Mons. Massimiliano Palinuro, Vicario Apostólico de Estambul, asistió al funeral de Cihan.
“Era como un ángel puro. Perdió la vida allí por la comunidad”, dijo el Obispo Palinuro en el funeral, según el medio turco BirGün. “Era un musulmán aleví, creía en Jesús como salvador y solía unirse con frecuencia a la Santa Misa”, comentó el prelado a CNA, agencia en inglés de EWTN News.
Según el alcalde del distrito de Sariyer, en Estambul, Sukru Genc, en el momento del atentado había en la iglesia entre 35 y 40 personas, incluyendo al cónsul general de Polonia, Witold Lesniak, y su familia.
“Cuando sonó el primer disparo, todos se tiraron al suelo. Tras la segunda detonación, el arma se encasquilló y ellos [los atacantes] salieron. No sabíamos que pasaría después, si es que el ataque continuaría”, señaló Genc a BirGün.
“Durante el ataque perdió la vida un ciudadano de Bayburt, un ciudadano musulmán. Según el sacerdote, era un visitante habitual de la iglesia y el presbítero conocía a esta persona; dijo que era una buena persona”, declaró el alcalde.
Los terroristas del Estado Islámico han reivindicado la autoría del atentado de Estambul en su medio de comunicación Aamaq, según informa Associated Press. Dos sospechosos –uno de Tayikistán y otro ruso– han sido detenidos.
El ministro del Interior turco, Ali Yerlikaya, los describió como miembros del Estado Islámico, mientras que la Conferencia Episcopal Turca ha pedido oraciones por la víctima y su familia.
“Exigimos firmemente que se revele la verdad y que se garantice una mayor seguridad a nuestras comunidades e iglesias. Pedimos a todos que no propaguen la cultura del odio y la discriminación religiosa”, ha señalado el Arzobispo de Esmirna y presidente del Episcopado turco, Mons. Martin Kmetec.
Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA