El artista urbano Mauro Pallotta, conocido por realizar grafitis con la imagen del Papa Francisco en las calles de Roma, ha sido seleccionado por el Vaticano para diseñar la imagen oficial de la Cuaresma de este año.
El artista, llamado “Maupal”, se hizo mundialmente conocido en 2014 con su primera obra en la calle, a la que tituló “Super Papa”. Actualmente es reconocido por ser uno de los máximos exponentes en el arte urbano y considerado uno de los treinta artistas callejeros más influyentes del mundo.
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Durante la presentación del mensaje del Papa Francisco para la Cuaresma 2024, que ha tenido lugar esta mañana en la Oficina de Prensa de la Santa Sede, este artista romano expresó su “orgullo y honor” de poder representar a través de su arte “las palabras que el Papa Francisco ha dirigido al mundo para el camino cuaresmal que estamos a punto de emprender”.
El autor de “Super Papa”, que también ha colaborado en los dos últimos años con proyectos en las cárceles de Roma, señaló que trabajar con presos “aporta una riqueza inesperada” y que con esta experiencia ha conocido a personas que han alcanzado “la libertad interior, la libertad que da Dios”.
“Con las ilustraciones para esta Cuaresma, me gustaría poder apoyar al Santo Padre de una manera sencilla pero eficaz, mientras nos guía en una profunda reflexión con sus palabras, y nos conduce por un camino que pretende llevarnos a abandonar nuestras esclavitudes, hasta llegar a la tierra prometida”, concluyó.
El mensaje del Papa Francisco
En su mensaje para la Cuaresma 2024, el Papa Francisco pone en relevancia un aspecto esencial del ser humano: la libertad.
En su mensaje, publicado bajo el título “A través del desierto Dios nos guía a la libertad”, el Santo Padre resaltó que, para lograr la libertad, primero hay que reconocer “la realidad” y darse cuenta de las esclavitudes interiores.
Recordó que “Dios no se cansa de nosotros” e invitó a acoger este tiempo de preparación para la Pascua como “un tiempo fuerte en el que su Palabra se dirige de nuevo a nosotros: ‘Yo soy el Señor, tu Dios, que te hice salir de Egipto, de un lugar de esclavitud””.
Para el Papa Francisco, la Cuaresma es además “tiempo de conversión, tiempo de libertad”, al tiempo que remarcó que “Dios no quiere súbditos, sino hijos”.
“El desierto — afirmó —, es el espacio en el que nuestra libertad puede madurar en una decisión personal de no volver a caer en la esclavitud”.
El Papa Francisco invitó también a los fieles a vivir la Cuaresma con alegría e instó a hacerlo con una valentía que lleve a la conversión y a salir de la esclavitud. “La fe y la caridad llevan de la mano a esta pequeña esperanza”, concluyó.