La Oficina de Prensa del Vaticano informó este lunes 29 de enero que el Papa Francisco decidió suprimir una prelatura apostólica en China, así como erigir una nueva diócesis y nombrar a su primer obispo, que ha sido consagrado hoy en el país asiático.
Estas decisiones del Santo Padre se dan en el marco del acuerdo provisional entre la Santa Sede y China para el nombramiento de obispos, firmado en 2018, y renovado ya en dos ocasiones, en 2020 y 2022, aunque su contenido no se ha hecho público.
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“Con el deseo de promover la atención pastoral de la grey del Señor y atender más eficazmente a su bien espiritual, el 20 de abril del 2023 el Sumo Pontífice Francisco decidió suprimir la prefectura apostólica de Yiduxian, en China continental, erigida el 16 de junio de 1931 por el Papa Pío XI, creando el territorio del vicariato apostólico de Zhifu (actual diócesis de Yantai), y erigir al mismo tiempo la nueva diócesis de Weifang, sufragánea de Jinan, en la provincia de Shandong, con sede episcopal en la iglesia catedral de Cristo Rey, situada en Quingzhou, en la ciudad de Weifang", señala un comunicado de la Oficina de Prensa del Vaticano.
La nueva diócesis de Weifan tiene una superficie de 16 167.23 kilómetros cuadrados y una población de 9.386.705 habitantes, incluidos alrededor de 6.000 que son católicos, liderados por diez sacerdotes y seis monjas.
Mons. Anthony Sun Wenjun, el obispo chino que ha sido consagrado este 29 de enero, nació en noviembre de 1970. Tiene 53 años.
Estudió en el seminario de Sheshan, en Shanghai, desde 1989 hasta 1994. Fue ordenado sacerdote en 1995 en la parroquia de Xishiku en Pekín.
Luego sirvió pastoralmente en Shandong entre 2005 y 2007. Después y entre los años 2007 y 2008 estuvo en Irlanda donde prosiguió con su formación. Al volver a Weifang, siguió desarrollando su ministerio.
Relación Vaticano - China
Durante la rueda de prensa en el vuelo de regreso de su viaje a Mongolia en septiembre de 2023, el Papa Francisco aseguró que “las relaciones con China son muy respetuosas” y que “los canales son muy abiertos”.
En ese sentido, señaló que “para el nombramiento de obispos hay una comisión que trabaja desde hace tiempo con el gobierno chino y el Vaticano”.