La organización China Aid Association denunció que la policía comunista detuvo a más de un centenar de cristianos pertenecientes a un grupo religioso clandestino en la región de mayoría musulmana de Xinjiang (noroeste del país).
Según la denuncia, los cristianos fueron rodeados por más de 200 policías en la localidad de Liugong del distrito de Changji. Estos agentes no mostraron una orden de detención ni papeles de identificación oficiales.
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China Aid Association agregó que la concentración religiosa había sido organizada con el fin de "formar y alentar a los trabajadores cristianos en la región de Xinjiang".
Como se sabe, el gobierno chino tiene prohibidas las actividades religiosas pero, teniendo en cuenta la existencia de numerosas comunidades clandestinas, el número de cristianos en China sería dos o tres veces mayor que la cifra oficial.