Los uruguayos se encuentran con María en un nuevo Rosario de Bendiciones

La Iglesia en Uruguay se alista para vivir una nueva edición del Gran Rosario de Bendiciones para la Familia, que se llevará a cabo el sábado 27 de enero.

La cita es a las 19:00 horas en la Rambla Armenia, entre el Museo Oceanográfico y el Liceo Francés, Aduana de Oribe, Montevideo, y como cada año se espera una gran concurrencia para compartir una de las prácticas devocionales más importantes de fe católica.

Los organizadores de la XIII edición del Gran Rosario de Bendiciones ya están ultimando detalles para esta fiesta en la que "Todo es por y para María", afirman. La principal protagonista del encuentro es la Virgen, a quien las familias acuden con su oración.

La preparación para el evento comienza un año antes, desde que finaliza la edición anterior. Se trata de “una tarea de tiempo completo, que la hacemos con mucho amor y fe”, aseguró  la coordinadora Esther Meikle. 

"Participar es una gracia incalculable. Todo es obra de Dios y es imposible no verlo. Pensar que un cuarto sábado de enero se congreguen miles de personas con tanto entusiasmo y amor que se derrama, es un gran gozo y lo vivimos con mucha alegría”, expresó.

En la organización trabajan alrededor de 250 voluntarios que comienzan a colaborar meses antes y cuya tarea es indispensable.

Previo al inicio del evento principal habrá distintas actividades. A partir de las 17:30 horas los sacerdotes administrarán el sacramento de la Reconciliación y desde las 18:00 horas los asistentes podrán disfrutar de música en vivo y oír los testimonios.

El acto de bienvenida será a las 19:00 horas, para luego recibir a la imagen de la Virgen y ofrecer el rezo del Rosario. Al finalizar, el Arzobispo de Montevideo, Cardenal Daniel Sturla, brindará un mensaje y su bendición.

Rezar, donar, difundir, son tres de las formas de participar en este Gran Rosario de Bendiciones. Quienes no tengan la posibilidad de contribuir económicamente, pueden acompañar con la oración por los frutos del encuentro con María, y también difundir la actividad, invitando a familiares y amigos a asistir, o compartiendo la convocatoria a través de las redes sociales.

"Las personas ya saben que el cuarto sábado de enero está el Rosario, y lo esperan con ansias. Además, contamos con la base de la experiencia de años anteriores, que nos permite mejorar sobre lo que ya se hizo y poder proponer cosas nuevas o adecuar las que ya se realizan”, puntualizó Meikle. 

“Quienes van nos comparten muchas historias de conversiones que son maravillosas y nos llenan el corazón. Es un privilegio muy grande el trabajar para algo que hace tanto bien a las personas”, concluyó.

Esta edición del Gran Rosario de Bendiciones para la Familia será exclusivamente presencial. Desde la organización aportarán algunos asientos, pero se pide asistir con una silla propia y llevar también agua. Durante el evento no se venderá bebida ni comida.