Durante los días previos y posteriores a la Navidad, cerca de 200 cristianos han sido asesinados a manos de pastores musulmanes de la etnia fulani en 26 aldeas nigerianas.
De acuerdo a la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), la matanza ocurrió en el estado de Plateau entre el 23 y el 26 de diciembre. La primera en ser atacada fue la comunidad rural Mushu, donde los pastores musulmanes mataron a 18 personas y dejaron varios heridos.
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Luego se lanzaron contra el pueblo de Tudun Mazat. La comunidad fue asaltada “cuando la mayoría estaba cenando, y aquellos que habían terminado estaban visitando a los amigos”. Además de cometer los asesinatos, los atacantes incendiaron las casas, las cosechas de maíz, las iglesias y las clínicas.
CNA, agencia en inglés de EWTN News, ha indicado que, según varias fuentes locales y activistas de derechos humanos, 198 cristianos fueron asesinados durante esos días.
El P. Andrew Dewan, director de comunicaciones de la Diócesis de Pankshin, ubicada en estado de Plateau, explicó a ACN que “el hecho de que (la matanza) ocurrió en Navidad” y que el objetivo eran los cristianos y no los habitantes musulmanes, lleva a la conclusión de que es un “conflicto religioso”. “El objetivo era infligir dolor y destrucción máxima a los cristianos”, señaló.
El sacerdote denunció que ha habido una pasividad por parte de las fuerzas de seguridad, pues desde hace días había rumores de que los fulani planeaban atacar estas 26 aldeas. “Estamos llegando al punto en el que, si no se hace algo drástico para lidiar con esta tormenta que se avecina, la tendencia de la gente a tomarse la justicia por sus propias manos será bastante alta”, advirtió.
Por su parte, María Lozano, directora de prensa de ACN, calificó este hecho como “uno de los [momentos] más violentos en la historia de la zona”.
En declaraciones a CNA, Lozano señaló que la “falta de respuesta del gobierno” durante varios años ha empeorado la situación en la región, obligando a las iglesias a asumir la “responsabilidad principal de brindar asistencia” a las comunidades.
Los pastores musulmanes fulani son originarios de la región del Sahel, un cinturón que recorre África desde el mar Rojo al océano Atlántico y que alguna vez fue habitable con tierras de pastoreo para los ganaderos.
Sin embargo, las sequías han provocado el desplazamiento de los pastores hacia el sur. ACN advierte que “en esta parte del ‘cinturón central’ de Nigeria es donde se están produciendo estos ataques de los pastores fulani para conseguir tierra sin restricciones y expulsando así a los lugareños que son cristianos”.
En ese sentido, Lozano ha indicado a CNA que las razones que están detrás de los ataques son una combinación de conflictos étnicos y religiosos entre los agricultores cristianos y los pastores nómadas fulani.
Desde su cuenta en la red social X, Bola Tinubu, presidente de Nigeria desde el 29 de mayo, ha ordenado una “movilización inmediata de fuentes de asistencia” y ha solicitado a las agencias de seguridad del país que “recorran cada parte de la zona” y “detengan a los culpables de estas atrocidades”.