El Cardenal Konrad Krajewski, limosnero apostólico, se encuentra en Tierra Santa este tiempo de Navidad como representante del Papa Francisco para llevar su cercanía y deseo de paz a los afectados por la guerra.
El purpurado, también prefecto del Dicasterio para el Servicio de la Caridad, ha visitado estos días Jerusalén, Belén y Nazaret para rezar por la paz “junto a los cristianos en nombre del Papa”.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
La autoridad vaticana ha realizado esta visita junto al patriarca de Jerusalén, el Cardenal Pierbattista Pizzaballa, con el que celebró una Misa en la Basílica del Santo Sepulcro el 24 de diciembre, víspera de Navidad.
En declaraciones recogidas por Vatican News, el Cardenal Krajewski destacó el deseo de “ayudar todos juntos a las personas necesitadas”.
Lamentó asimismo que a pesar de que Gaza “está muy cerca”, la falta de agua, de electricidad, y el elevado número de heridos que “no pueden ser trasladados para recibir tratamiento”, impiden que los que están sufriendo reciban ayuda.
El purpurado también ha visitado a los voluntarios de Cáritas del Patriarcado Latino, que acogen a algunas familias sin recursos del centro de Jerusalén, y a las hermanas Misioneras de la Caridad.
Asimismo, el limosnero del Papa se ha podido reunir con el párroco de Gaza, el P. Gabriel Romanelli, quien le ha informado sobre la situación que se vive en la única parroquia católica de la Franja, donde se encuentra el párroco auxiliar, P. Giuseppe, quien mantiene conversaciones telefónicas casi diariamente con el Papa Francisco.
Cabe recordar que la iglesia de la Sagrada Familia de Gaza, que desde el inicio de los enfrentamientos se ha convertido en un refugio para cientos de personas, fue atacada el pasado 16 de diciembre, provocando la muerte de dos mujeres.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han negado en varias ocasiones las afirmaciones de que un francotirador de sus tropas fuera el autor de este ataque.
“He venido a Tierra Santa con fe y oración, a estos lugares donde la guerra hace estragos, donde hay odio, donde hay venganza, donde unos matan a otros, donde no hay agua, ni comida, donde no hay electricidad. Incluso en Navidad, los días más sagrados para nosotros, no han dejado de luchar, de matar, tanto en Ucrania como en la Franja de Gaza”, remarca el Cardenal Krajewski.
El purpurado asegura haber emprendido su viaje “con las armas más sofisticadas del mundo, es decir, la fe y la oración, que siempre pueden mover montañas y así poner fin a los conflictos”.
Destaca, además, que ha visitado todos los lugares donde estuvo Jesús y reza a Dios por los que sufren las consecuencias de la guerra. “Mi esperanza es que la paz florezca realmente en el corazón de los hombres”, concluyó.
La guerra entre Israel y los terroristas de Hamás ha provocado que las autoridades de Belén, ubicada en el territorio palestino de Cisjordania, hayan suspendido todas las actividades civiles de Navidad, por lo que durante estos días sólo han tenido lugar las celebraciones religiosas.
A esto debe sumarse que la mayoría de los cristianos de Tierra Santa viven del turismo y de las peregrinaciones, por lo que la cancelación de estas ha provocado la ausencia de recursos para las familias.
En más de una ocasión el Papa Francisco ha expresado su cercanía con los cristianos de Tierra Santa, especialmente en estas fechas en las que están viviendo, según el Pontífice, una “Navidad de dolor”.