Mons. Miguel Cabrejos, Arzobispo de Trujillo y Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), exigió una investigación exhaustiva y reclamó justicia ante la trágica noticia del asesinato de 10 mineros en el norte del país el sábado 2 de diciembre.
“Con profunda indignación he recibido la trágica noticia del asesinato de 10 trabajadores de la Compañía Minera Poderosa S.A., por parte de presuntos mineros ilegales, ocurrido el día de ayer en la provincia de Pataz, región La Libertad”, indicó en un comunicado difundido el 3 de diciembre.
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El último sábado, según reporta Infobae, alrededor de la 1:00 a.m. (hora local) 20 trabajadores de la minera fueron secuestrados y llevados a un socavón, donde individuos armados les lanzaron dinamita. El resultado de la explosión fue devastador, cobrando la vida de 10 trabajadores y dejando a otros 13 heridos.
Las víctimas de este acto violento eran jóvenes obreros que laboraban en la concesión minera, con edades comprendidas entre los 20 y 30 años.
Mons. Cabrejos cuestionó la brutalidad del acto y planteó interrogantes que reflejan la profunda preocupación por el estado de la sociedad: “¿Cómo es posible que un ser humano le quite la vida a otro de manera tan cobarde? ¿Acaso el afán del dinero o del poder están por encima del valor sagrado de la vida humana? ¿Hemos llegado a niveles tan miserables e inhumanos en nuestra sociedad que ya no importa quitar la vida a las personas?”.
El Prelado hizo un llamado urgente para detener la ola de violencia en el Perú, exclamando: “¡Basta ya de tantas muertes, que enlutan a nuestras familias y provocan el pánico en nuestra sociedad! ¡Que este hecho detestable no quede impune!”.
Desde su posición como Pastor de la Iglesia en Trujillo, Mons. Cabrejos instó a las autoridades policiales, judiciales y al Gobierno a “investigar este cruel asesinato e identificar a los victimarios de este hecho y sancionarlos ejemplarmente, aplicando todo el rigor de la ley, porque el derecho a la vida está por encima de todo”.
Hasta el momento, la Iglesia de Trujillo, a través de sus parroquias, ha expresado su solidaridad con los familiares de las víctimas. Mons. Cabrejos aseguró: “Les acompañamos con nuestra oración permanente” y solicitó intercesión: “Pedimos al Señor de la Vida y a la Inmaculada Virgen de la Puerta por el eterno descanso de las víctimas”.
El Ministerio del Interior del Perú, en respuesta a los hechos ocurridos en las instalaciones de la compañía minera, ha dispuesto el traslado de un contingente policial las fuerzas especiales para intensificar las operaciones en la zona.
En un comunicado del 2 de diciembre, informó que la Policía Nacional ha tomado el control de la situación, habiendo detenido hasta el momento a siete presuntos delincuentes e incautado armamento.